Mundo

Rusia y Turquía difieren sobre sus roles para mantener la paz entre Armenia y Azerbaiyán


Los rusos aseguraron que no habrá observadores ni pacificadores turcos en la región separatista de Nagorno Karabaj

Rusia aseguró este jueves que no habrá observadores ni pacificadores turcos en la región separatista de Nagorno Karabaj, tras el acuerdo firmado entre Armenia y Azerbaiyán que puso fin a seis semanas de hostilidades, aunque Ankara sostiene que sí participará de la misión en la zona.

«No se enviarán unidades de fuerzas de paz de Turquía a Nagorno Karabaj», dijo el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en una entrevista con medios rusos y extranjeros que reproduce la agencia Sputnik. El funcionario señaló que los observadores turcos se desplegarán en el centro ruso-turco para controlar la tregua, que se encontrará en el territorio de Azerbaiyán. Además Lavrov apuntó que este centro operará a distancia, con el uso de vehículos aéreos no tripulados.

«El centro operará exclusivamente en modo remoto, utilizando medios técnicos de control objetivo, incluidos drones y otras tecnologías que permiten determinar la situación en (Nagorno) Karabaj, principalmente en la línea de contacto, y determinar qué parte está observando y qué podría estar violando las condiciones de alto el fuego», indicó el ministro.

«Tenemos una tarea común con Turquía, como dije, es monitorear (…) la situación en el área de la operación de fuerzas de paz. La operación la lleva a cabo exclusivamente el contingente de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia. Aquí no hay ambigüedades», constató.

Los ministros de Relaciones Exteriores de Armenia y Azerbaiyán viajaron hoy a Moscú para iniciar las nuevas negociaciones de paz, en lo que es la primera esperanza para que haya un cese de las hostilidades que comenzaron el 27 de septiembre en la región separatista de Nagorno Karabaj

Ayer, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que su país participará con Rusia en la misión de paz conjunta en Nagorno Karabaj, enclave de mayoría armenia, que declaró su independencia de Azerbaiyán pero nunca logró reconocimiento internacional. Hoy, el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, insistió en que «los militares turcos actuarán dentro de la misión de paz conjunta». En ese sentido, el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, declaró hoy que «ese tema no se ha discutido» y que desde el principio de las negociaciones, Moscú y Ankara mantienen «puntos de vista distintos» al respecto.

El acuerdo firmado el lunes establece que cada parte, Armenia y Azerbaiyán, mantendrán las zonas «conquistadas», mientras que una fuerza de paz extranjera -por ahora solo hay confirmados 1.960 rusos- controlará el cese de hostilidades en la línea divisoria de facto entre los lugares bajo control armenio y azerbaiyano, y entre el Nagorno Karabaj separatista y la República de Armenia.

Diez figuras de la oposición armenia fueron detenidas en las últimas horas por su presunta implicación en manifestaciones violentas en contra de la firma del cese de hostilidades que consagra la victoria de Azerbaiyán, indicó la agencia de noticias AFP.

Entre los detenidos hay dirigentes de las formaciones Armenia Próspera y Federación Revolucionaria Armenia, del Partido Republicano así como del Partido de la Patria, a los que se acusa de «organización ilegal de desórdenes de masa violentos», un delito que se castiga con 10 años de cárcel.

Más de 30.000 personas murieron en la primera guerra por el control del territorio de Nagorno Karabaj en los años 90 y en 1994 ambas partes firmaron un alto el fuego, que desde entonces fue interrumpido a menudo por escaramuzas y enfrentamientos.

El conflicto se mantuvo en mayor parte congelado hasta que el 27 de septiembre pasado, los enfrentamientos entre las fuerzas azerbaiyanas, armenias y las de la región separatista escalaron hasta convertirse en una nueva guerra que duró seis semanas.