Miles de manifestantes se congregaron ayer para pedir la liberación del político
La policía arrestó a por lo menos 1.784 personas en las manifestaciones de apoyo al opositor encarcelado Alexey Navalny, que tuvieron lugar ayer en Rusia, indicó la ONG OVD-Info, mientras que el Kremlin reafirmó que las protestas no fueron autorizadas.
Miles de manifestantes se congregaron ayer para pedir la liberación de Navalny, en huelga de hambre desde hace tres semanas, en una movilización que fue menor a la de las protestas que siguieron a su detención, a principios de año.
Según OVD-Info, la mayoría de los arrestos -805 personas- tuvieron lugar en San Petersburgo, segunda ciudad de Rusia, donde se registraron varios casos de violencia policial. Al menos 84 manifestantes pasaron la noche detenidos, según esta fuente.
En Moscú, los manifestantes, concentrados en diferentes marchas, protestaron cerca del Kremlin y, después, de la sede de los servicios de seguridad (FSB), sin que los agentes antidisturbios intervinieran, indicó la agencia de noticias AFP. Los simpatizantes del opositor convocaron estas marchas el miércoles para hacerlas coincidir con el discurso sobre el estado de la nación del presidente, Vladimir Putin.
«No vemos razones para dar una evaluación (de las protestas), el tema corresponde a los organismos del orden público, del Interior», dijo hoy el vocero presidencial ruso, Dmitri Peskov, y recordó que las marchas no fueron autorizadas. «El evento más importante de ayer fue el mensaje del presidente a la Asamblea Federal», destacó el portavoz citado por la agencia de noticias Sputnik
En una entrevista con la misma agencia, la defensora del pueblo de Rusia, Tatiana Moskalkova, también expresó su confianza en que la gente «se dé cuenta de la importancia de respetar la ley», así como de las medidas contra el coronavirus.
De acuerdo con las autoridades penitenciarias y sus abogados, Navalny, que exige ver a sus médicos de confianza, se encuentra en un hospital para presos, donde recibe suero y un tratamiento con vitaminas. El líder opositor tiene una doble hernia y una protusión discal, y adelgazó 16 kilos desde que ingresó en prisión en febrero último y nueve desde que se negó a ingerir comida, según sus allegados.