Instituciones y referentes de la ciencia y de la investigación local firmaron un documento para el desarrollo del conocimiento en la nueva Constitución provincial
En el marco de los preparativos para la inminente reforma de la Constitución de Santa Fe, el Concejo Municipal de Rosario fue sede de un encuentro clave que reunió a científicos, legisladores, concejales y futuros convencionales constituyentes para discutir la inclusión del sistema científico-tecnológico en la nueva carta magna.
El evento, impulsado por la Comisión de Producción y Promoción del Empleo del Concejo, tuvo como protagonistas a referentes del Conicet Rosario, entre ellos su director, Guillermo Labadie, y su vicedirector, Cristian Molina, así como también a autoridades de institutos de investigación, universidades y facultades de toda la provincia. La propuesta central: que el compromiso del Estado con la ciencia y la tecnología quede establecido en la nueva Constitución provincial.
Durante el encuentro, Labadie afirmó que “venimos a proponer algo muy simple, pero profundamente transformador: que el compromiso del Estado con la Ciencia y la Tecnología quede garantizado en la letra de la nueva Constitución”. La propuesta fue respaldada por un documento firmado por más de 60 instituciones científicas, académicas y educativas de toda la provincia, que también fue entregado a los convencionales presentes.
La presidenta de la comisión organizadora, la concejala Norma López, destacó: “Es fundamental que la nueva Constitución reconozca el papel central del sistema científico en la construcción de una provincia más justa y desarrollada. Desde Rosario queremos aportar una mirada estratégica que ponga el conocimiento al servicio de la gente”.
Una Constitución que mire al futuro
Entre los convencionales constituyentes presentes estuvieron Juan Monteverde, Lucila De Ponti, Diego Giuliano, Pablo Corsalini, Josefina del Río, Daiana Gallo Ambrosis, Rubén Giustiniani, María Eugenia Martínez y José Daniel Machado, quienes escucharon las propuestas del sector científico con el objetivo de trasladarlas al debate constitucional que comienza formalmente el 14 de julio.
Uno de los puntos salientes del documento entregado propone que el rol del sistema científico-tecnológico esté garantizado por rango constitucional, para asegurar su continuidad más allá de los cambios políticos. También se planteó dotar de mayor autonomía a la autoridad de aplicación de la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación N° 13.742/17, con recursos asegurados y capacidad de incidencia transversal en las políticas públicas.
Un entramado científico al servicio del desarrollo
La lista de instituciones firmantes del documento incluye a centros de investigación como el Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario, el Instituto Nacional de Limnología de Santa Fe, y facultades de la UNR y la UNL, entre otras. También participaron directivos de escuelas preuniversitarias, de la UTN Rosario y del Instituto Politécnico Superior, mostrando la amplitud del respaldo al pedido.
“Una provincia que apueste por el conocimiento es una provincia que apuesta por su gente”, sintetizó Esteban Serra, vicedirector del Instituto de Biología Molecular de Rosario (IBR). La frase resume el espíritu de un encuentro que, más allá de diagnósticos, se propuso construir una herramienta concreta: una Constitución que defienda el conocimiento como un bien público esencial para el desarrollo.