El diputado nacional Roberto Mirabella anunció este domingo, a través de una carta pública, que no será candidato en los comicios legislativos del próximo 26 de octubre. Referenciado en el sector del exgobernador Omar Perotti, el dirigente señaló que la “falta de unidad” en el peronismo santafesino fue determinante en su decisión.
“Es doloroso ver como la interna bonaerense se trasladó a Santa Fe, convirtiendo a nuestra provincia en un distrito más del peronismo de Buenos Aires”, expresó Mirabella en el comunicado. Y agregó: “Estamos cansados de que los peronistas santafesinos seamos espectadores de la interna de intereses ajenos”.
El legislador, que concluye su mandato el 10 de diciembre, remarcó que había manifestado a las autoridades partidarias su aspiración de participar en los comicios, pero cuestionó que “las decisiones se tomen a dedo en el peronismo de Santa Fe”.
Con la declinación de Mirabella, la interna en Fuerza Patria queda polarizada entre las listas que encabezan los diputados nacionales Agustín Rossi y Florencia Carignano. Ese frente está conformado por el Partido Justicialista, Frente Renovador, Ciudad Futura, Santafesino Cien por ciento, Partido Solidario, Principios y Valores, PPS, Unidad Popular, Patria Grande y Partido Federal.
El plazo para la presentación de listas vence este domingo a la medianoche, y en Santa Fe estarán en juego nueve bancas en la Cámara de Diputados de la Nación.
El texto de Roberto Mirabella
En mi última carta dirigida al presidente del Partido Justicialista manifesté mi aspiración en participar en las próximas elecciones de octubre y que el Partido tuviera los procederes más amplios y democráticos en lo que hace a las definiciones de cara al proceso electoral. De hecho, recurrimos a todos los recursos legales y políticos a fin de evitar que las decisiones se tomen a dedo en el peronismo de Santa Fe.
Pero como no hay unidad de concepción tampoco hay unidad de acción. Es doloroso ver como la interna bonaerense se trasladó a Santa Fe, convirtiendo a nuestra provincia en un distrito más del peronismo de Buenos Aires. Estamos cansados que los peronistas santafesinos seamos espectadores de la interna de intereses ajenos. Los arreglos y acuerdos que se cierran en despachos porteños son a costa de los intereses de Santa Fe. Nosotros pretendemos en serio la UNIDAD, que es mucho más que una lista única.
Todo proceso de unidad requiere resolver dos problemas. Cuál es el límite de la diversidad y quien la conduce. En esta dispersión, fragmentación y desorientación es difícil encontrar el agujero del mate. Además, entendemos que no podemos hacer lo mismo que criticamos.
Es evidente que en este contexto de crisis la desconexión entre la dirigencia política y la ciudadanía la estamos agravando. No queremos discutir cargos. No queremos que desde Buenos Aires nos digan lo que hay que hacer. Queremos construir un proyecto de desarrollo nacional basado en los que trabajan, producen, invierten, educan y generan valor. Y eso se hace desde Santa Fe, que es el corazón productivo de la Argentina, no desde el Obelisco.
¿Qué tenemos para decirle hoy a los que van perdiendo el empleo, a los jubilados, a los que trabajan en la informalidad, a las víctimas por el abandono de nuestras rutas, a la universidad pública desfinanciada, al sector científico tecnológico abandonado, a las pymes, a los trabajadores, a las instituciones que todavía sobreviven como las cooperativas, los clubes o las instituciones de la cultura?
Perón decía “Sensibilidad e imaginación para ver, base para apreciar; apreciar, base para resolver y resolver, base para actuar”. Lo tengo presente para percibir correctamente la realidad, reflexionar profundamente y tomar decisiones y acciones certeras. Algunos dirigentes veneran a Perón en el momento de las efemérides, pero practican poco y nada sus enseñanzas.
Como estamos empachados de egoísmos personales y sectoriales, nosotros decidimos no seguir en esta discusión de cargos y lugares en las listas ya que no queremos profundizar las diferencias, ni ser parte de la desunión ni del espectáculo de la discordia ya que eso seguramente no nos llevara a tener buenos resultados.
Hace ya un tiempo largo que me viene retumbando esta pregunta ¿Si tenemos otra sociedad no deberíamos tener otra política?
La primera colonia agrícola santafesina y argentina se llamó Esperanza. El origen de la palabra Esperanza viene de esperar, del latín sperare. Es posible que los inmigrantes de habla alemana y de religión protestante junto con los de idioma francés y culto católico, encontraran una coincidencia en una palabra bíblica para nombrar su nuevo lugar de vida, que refiere no a esperar cualquier cosa, sino a tener una expectativa optimista del futuro, de alcanzar lo que se desea y nos moviliza hacia una dirección donde todo va a ser mejor.
Sigamos sembrando ya que plantar una semilla encierra en si misma muchísima Fe.
