Por Enrique Genovar
Que el fútbol se maneja por resultados es verdad. También lo es el hecho de que con un funcionamiento adecuado es más fácil llegar al objetivo de obtener un buen resultado. Dos premisas que a veces van de la mano y otras veces no, pero que buscan lo mismo: ganar. El Central del Kily en el último partido del año logró el resultado, no así el funcionamiento.
El Canalla ganó en Mar del Plata y se consolidó en la cima de su grupo. Tal es así que el sábado jugará un encuentro muy importante que, de ganar, quedará a la postre de terminar como líder y alimentará aún más la chance de que haya clásico.
El juego que tuvo el equipo del Kily no fue bueno. Le costó. No le sobró nada. Pero este equipo aún no está para dar espectáculo, de hecho, en lo que se jugó después del receso solamente gustó cuando recibió a Patronato.
Frente a Aldosivi el entrenador apostó por algunos nombres que dieron qué hablar, que ya habían tenido oportunidades y no la habían aprovechado. En Mar del Plata algunos jugadores aprovecharon para cambiar la imagen que había dejado y otros continuaron con el mismo rendimiento que habían tenido y por el cual perdieron su lugar.
Uno de los que aprovechó la chance fue el arquero Marcelo Miño. El juvenil fue uno de los mejores, dio seguridad y aportó una presencia importante en todo el partido. Lo que volvió a generar dudas fue la dupla de centrales conformada por Laso y Bottinelli. Los dos experimentados no tuvieron un buen entendimiento y las pocas situaciones que tuvo el rival llegaron tras yerros de ellos.
Más allá de esto, se dio una particularidad en el triunfo canalla en La Feliz. El entrenador metió mano en el equipo para defender la victoria. Puso y sacó en un mismo capítulo a Infantino; es que no hay dudas de que el Kily tiene que ganar espaldas y como hasta ahora su equipo no representa lo que él busca sabe y se mostró consciente de que la única manera de que su espalda crezca es con resultados. Por este motivo no dudó en poner una línea de cinco ante el humilde Aldosivi.
Central tiene muchas cosas que mejorar. Y algunas de ellas parece que solamente se sanarán con la llegada de refuerzos. Mientras tanto el DT busca resultados que lo pongan al Canalla lo más arriba posible, algo que por ahora lo está logrando.