Numerosos afiliados y militantes socialistas publicaron un comunicado con casi mil firmas en el que se propone, entre otras cosas, la unidad del partido para dar una alternativa "superadora"
Afiliados y militantes socialistas fijaron posición con respecto al próximo proceso de renovación de autoridades que se desarrollará el 18 de abril. En un texto difundido, firmado por casi 1.000 afiliados, explican que con la experiencia de militar diariamente y gobernar ciudades como Rosario, Santa Fe y Villa Gobernador Gálvez, así como también la Casa Gris desde 2007 hasta 2019, el socialismo logró «la convicción de ser parte de un proyecto, de encarnar una forma de hacer política diferente, con un sentido colectivo y la mirada siempre puesta en un horizonte de igualdad, solidaridad, honestidad y participación». El dirigente Rubén Galassi dijo ayer a CLG que «el objetivo es la unidad, porque el problema no está adentro del PS, el problema es el gobierno de Perotti. Y para reconstruir una propuesta que nos permita volver a tener gobierno progresista Santa Fe es necesario un partido unido, dinámico y diverso, con nuevas ideas para la sociedad«.
Como es de público conocimiento, en tanto, el sector de Eduardo Di Pollina se presenta a interna, mientras que Miguel Lifschitz propone a Mónica Fein para dirigir el partido.
En el escrito presentado por el Partido Socialista, los firmantes exponen tres puntos fundamentales de cara a los comicios venideros. El primero de ellos apunta a un «Partido Socialista unido en la diversidad», ya que aseguran que «el fortalecimiento de nuestra organización lo conseguiremos a partir del reconocimiento de la diversidad de miradas, procedencias y trayectorias, como cimientos de la unidad partidaria». Además, promueven el diálogo horizontal en el cual se «respeten, reconozcan y legitimen distintas visiones».
«Entendemos que hoy más que nunca la coyuntura política, económica y social en la que se encuentran nuestra nación y nuestra provincia requieren de los socialistas gestos de entendimiento, diálogo y concertación para poder utilizar las energías en resolver los graves problemas que atraviesa la sociedad«, sentenció el texto, que lleva las firmas de Leonardo Caruana, Ruben Galassi y Susana Rueda, entre otros.
De todas formas aclararon que la «unidad no implica homogeneización ni imposición» sino más bien una «oportunidad para convivir en la disidencia, reconociendo y respetando las historias y los recorridos de cada militante».
El segundo punto refuerza la idea de un PS como «autónomo y protagonista de la realidad nacional». El comunicado critica los cuatro años del gobierno de Mauricio Macri y advierte que el actual gobierno de Alberto Fernández «no está desarrollando un plan» para un «futuro más justo». Frente a este contexto, remarca que el partido debe estar «fuerte, autónomo, independiente y con un proyecto claro«.
«Necesitamos un PS que respete su historia de lucha por la igualdad y, de cara al futuro, defienda los derechos de trabajadoras y trabajadores y de las mayorías nacionales, bregando por la justicia y la libertad«, así como también ser una alternativa superadora en la política de la última década argentina.
Otro de los ítems brega por sostener una «vocación frentista» para lograr conducir los hilos de Santa Fe nuevamente. La provincia estuvo 12 años bajo el manto socialista de Hermes Binner, primero, luego de Antonio Bonfatti y por último de Miguel Lifschitz. El escrito sostiene que una de las bases para volver a dominar la Casa Gris es con «voluntad frentista» junto a «otros partidos y organizaciones sociales», que Antonio Bonfatti acompañó.
En este contexto, dispara contra el gobierno provincial de Omar Perotti por la suspensión de planes impulsados desde el seno socialista como el Plan Abre, el Nueva Oportunidad, el Vuelvo a Estudiar y «un plan de obras inédito de hospitales, escuelas, acueductos y rutas». Para encaminar al partido, subraya el comunicado, se debe «reconstituir y profundizar el diálogo» en el Frente Progresista para así poder «incorporar nuevas fuerzas políticas y sociales» como gremios, organizaciones, «nuevas expresiones y colectivos que luchan por causas justas y nobles como el feminismo o el ambientalismo».
Por último, las más de 900 firmas piden una renovación en su «estructura institucional para fortalecer su crecimiento» siguiendo con el marco de unidad, así poder constituir un orden partidario que «promueva y legitime nuevas formas de participación y representación» para contemplar realidades locales y departamentales, que «respete la paridad de género» y que motive la participación de trabajadores, jóvenes, pueblos originarios, el colectivo LGBTIQ+, entre otros.
«Queremos un socialismo que, fiel a su historia, lleve en sus genes la diversidad para multiplicar y potenciar su mensaje«, se lee en el texto del PS y agrega: «Jamás nos hemos creído los únicos representantes válidos del pueblo, aún con un apoyo mayoritario de la ciudadanía en las urnas. Ese sentido democrático e institucional que proponemos y practicamos en nuestras acciones de gobierno debe ser la que se exprese en el seno de nuestro partido, constituyéndose en los cimientos de nuestra estructura organizacional«.
«Planteamos, en definitiva, afianzarnos en nuestras convicciones y capacidades, y trabajar desde el encuentro en la unidad para lograr un proceso de cambios en nuestra organización que se proyecte, con el mismo espíritu transformador, a toda la sociedad«, cierra el comunicado.
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