Se trata de la cifra más baja en dos semanas. El total de víctimas fatales ascendió a 16.522
Reino Unido registró este lunes en los hospitales 450 nuevas muertes por coronavirus, la menor cifra diaria de fallecidos de las últimas dos semanas, elevando el total de víctimas fatales a 16.522, según adelantaron algunos medios locales.
El aumento es el menor incremento diario en dos semanas cuando el Departamento de Salud (DoH) registró 439 muertes el 6 de abril, luego de haberse producido picos muy altos durante el fin de semana.
Mientras tanto, una aplicación de seguimiento de datos del King’s College de Londres, mostró que la cantidad de personas con síntomas de coronavirus se desplomó en un 75 por ciento desde principios de abril.
También los expertos y asesores científicos del gobierno británico coinciden en que los casos se están estancando, aunque advirtieron que todavía hay miles de infectados.
El gobierno está bajo presión desde distintos ámbitos para levantar la cuarentena, sin embargo la idea de una salida temprana no será posible por el momento en el Reino Unido debido a que el primer ministro, Boris Johnson, se mostró reacio ante sus colegas y dejó entrever que la prioridad ahora es evitar un segundo pico del coronavirus, aunque el país ha comenzado a aplanar la curva de los fallecimientos.
«La gran preocupación es un segundo pico. Eso es lo que finalmente causará el mayor daño a la salud y el mayor daño a la economía. Si te mueves demasiado rápido, entonces el virus podría comenzar a extenderse exponencialmente nuevamente», expresó el portavoz oficial del primer ministro, durante una sesión informativa en las puertas de Downing Street, la residencia oficial del gobierno.
Dijo que la gente debe esperar a que se haga todo lo posible para detener la propagación del virus.
Si bien Johnson continúa recuperándose después de haber estado gravemente afectado por el coronavirus, recibe actualizaciones diarias sobre las acciones que lleva adelante su gabinete en la lucha contra el coronavirus, pero aún no ha vuelto oficialmente a trabajar. El primer ministro se está quedando actualmente en Chequers, la residencia de campo del gobierno británico, mientras se recupera del coronavirus.