El último trimestre se registró una cifra récord de civiles muertos o heridos en Afganistán, informó la misión de la ONU en el país asiático (Unama). El reporte revela un aumento del 42% con respecto al mismo período del año pasado.
«Entre el 1 de julio y el 30 de septiembre de 2019, la Unama documentó 4.313 víctimas civiles (1.174 muertos y 3.139 heridos). Este es el número más alto de bajas civiles registrado por la Unama en un solo trimestre desde que empezó la documentación sistemática en 2009», señaló la misión en un informe.
A su vez, subrayó que el aumento de víctimas civiles ocurrió en el mismo período en el que Estados Unidos y los talibanes se reunían en Qatar para tratar de alcanzar un acuerdo de paz tras 18 años de guerra, algo que más tarde fue enterrado por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Las cifras revelan un aumento del 42% de la violencia respecto al mismo periodo del año pasado y ponen fin a una tendencia a la baja que se venía registrando desde principio de año. Entre enero y septiembre murieron 2.563 civiles y 5.676 resultaron heridos en Afganistán, un número similar a los que experimenta la nación asiática desde 2014, según el organismo. De ese total de víctimas civiles, un 41% eran mujeres y niños.
La Unama advirtió que muchas de esas muertes ocurrieron en operaciones aéreas de la coalición internacional y las fuerzas aéreas afganas en su combate contra la insurgencia, informó la agencia de noticias EFE. Las muertes a manos de la insurgencia antigubernamental y las fuerzas gubernamentales es casi igual: 1.207 civiles murieron a manos de los primeros entre enero y septiembre de este año y 1.149 a manos de las segundas.
«El daño causado a los civiles por la lucha en Afganistán subraya la importancia de unas negociaciones de paz que conduzcan a un alto el fuego y una solución política permanente al conflicto, no hay otra solución posible», aseveró el el jefe de la Unama, Tadamichi Yamamoto.