Policiales

Reconquista: juzgan a un cura acusado de abusar de dos niños


El proceso penal contra un sacerdote por abusar de un nene de un año y una nena de tres comenzará el próximo jueves

El proceso penal contra un sacerdote por abusar de un nene de un año y una nena de tres comenzará el próximo jueves

Un cura de la ciudad santafesina de Reconquista comenzará a ser juzgado el próximo jueves, acusado de abuso sexual gravemente ultrajante contra un niño de un año y una niña de tres años, en hechos denunciados hace cuatro años, cuando estaba al frente de la parroquia María Madre de Dios.

Se trata del cura Néstor Monzón, quien afronta el proceso judicial en libertad, acusado además de haberle contagiado una enfermedad venérea a la niña.

La denuncia fue realizada por la madre de la niña el 23 de diciembre de 2015, que pertenece a una familia cercana a la parroquia donde se desempeñaba Monzón y que solía colaborar con varios aspectos.

Esa nena, que es prima del niño involucrado en la denuncia, contó los abusos del cura en cámara Gesell y voceros del caso señalaron que siempre mantuvo sus dichos y que fueron coherentes.

En el caso del chico, cuya familia presentó la denuncia en abril de 2016, no fue sometido a esa prueba todavía debido al consejo de las psicólogas, que detectaron rastros del trauma que le ocasionaron los abusos.

La situación se agrava en el caso de la nena por haber sido diagnosticada de virus del papiloma humano (VPH) durante 2016.

Al momento de las denuncias Monzón era párroco en María Madre de Dios y vicepresidente de Cáritas Reconquista, entre otros cargos y responsabilidades.

Fue detenido por orden del fiscal Alejandro Rodríguez, imputado por los abusos, aunque luego recuperó la libertad con restricciones como la tener prohibido acercarse a las víctimas y sus familias.

El fiscal adelantó que pedirá una pena de 12 años de prisión, en tanto desde la parte querellante solicitarán 16 años.

Rodríguez señaló a diario Uno de Santa Fe que con las pruebas colectadas hay suficiente para obtener un fallo condenatorio y remarcó «que los hechos fueron cometidos por un hombre mayor de edad, ministro de un culto religioso, practicado en contra de niños en condiciones de alta vulnerabilidad, quienes debieron soportar el abuso en circunstancias gravemente ultrajantes para su presente y futuro».

En relación a la nena, el fiscal añadió que «lo ocurrido se dio en un contexto concreto de violencia de género que nuestra ley repudia, a la que, además, transmitió una enfermedad que dañó significativamente la salud de la menor».