Una joven de 19 años fue quemada y murió luego de denunciar al director de su escuela por abuso en Bangladesh, el hombre habría ordenado el ataque. La violenta muerte de Nusrat Jahan Rafi generó protestas en el país.
Nusrat realizó la denuncia en la policía en marzo. Un video que se filtró de ese momento muestra al efectivo policial que le tomó la declaración calificándola «de poca importancia».
Poco después, el 6 de abril, un grupo de profesores y compañeros llevaron a la joven hasta la terraza de la escuela y le pidieron que sacara la denuncia. Ante su negativa, la ataron con un pañuelo, le tiraron nafta encima y la quemaron. Según la policía, de las 17 personas detenidas hubo una que acusó al directo de digitar el ataque.
«Les dijo que presionaran a Rafi para que retirara la denuncia o que la mataran si se negaba», detalló a la agencia de noticias AFP el superintendente de la policía Mohammad Iqbal, encargado de conducir la investigación. «El plan era hacer pasar el incidente por un suicidio. Pero fracasó después de que Rafi lograra bajar las escaleras mientras estaba en llamas porque el pañuelo se quemó y liberó sus manos y pies», agregó.
La joven tuvo quemaduras en el 80% de su cuerpo. Tras cuatro días en el hospital, murió. De todas maneras, antes de fallecer grabó un video en el que reiteró las acusaciones. «El maestro me tocó, lucharé contra este crimen hasta mi último aliento», aseguró. Nusrat pudo también identificar a uno de sus atacantes.
Sheikh Hasina, primera ministra de Bangladesh, prometió: «Ninguno de los culpables se librará de acciones legales». Por otro lado, la directora para Asia del Sur de la organización Human Rights Watch, Meenakshi Ganguly, declaró: «El horroroso asesinato de una mujer valiente que buscó justicia muestra lo mucho que ha fallado el gobierno de Bangladesh a las víctimas de agresiones sexuales».
La muerte de Rafi «pone de relieve la necesidad de que el gobierno de Bangladesh tome en serio a los supervivientes de la violencia sexual y se asegure de que pueden buscar un remedio legal y ser protegidas de represalias», finalizó.