Los hechos ocurrieron en la ciudad de Vera, entre 2007 y 2020, y las víctimas son hijas de la pareja del acusado
Un hombre de 69 años, cuyas iniciales son SOS, quedó en prisión preventiva en el marco de una investigación por la autoría de delitos contra la integridad sexual cometidos en perjuicio de dos hijas de su pareja en la ciudad de Vera. Así lo ordenó el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Martín Gauna Chapero, en una audiencia desarrollada ayer en los tribunales verenses.
El fiscal que solicitó que el imputado fuera privado de su libertad es Leandro Benegas. “El magistrado consideró acreditados los requisitos necesarios para imponer la medida cautelar sin plazo, por lo que el hombre deberá cumplirla durante el tiempo que dure el proceso judicial”, indicó.
“En la audiencia expusimos que el imputado llevó a cabo diferentes acciones para procurar su impunidad y estaba en condiciones de entorpecer la investigación”, remarcó. Al respecto, mencionó que “el hombre de 69 años se valió de su trabajo vinculado a los medios de comunicación para evitar ser denunciado y luego intentó dirigir la opinión pública a su favor”.
Por otro lado, el funcionario del MPA manifestó que “nos preocupaba el estado de fragilidad psíquica y emocional de una de las víctimas, cuyo testimonio es indispensable recabar, y puntualizamos que esta situación debía cautelarse”. Según añadió, “la Querella compartió este argumento e hizo hincapié en el peligro de fuga”.
Benegas se refirió a que “quien quedó en prisión preventiva abusó de las víctimas entre 2007 y 2020, cuando ellas eran menores de edad y convivían con él”. Agregó que “en la mayoría de las oportunidades, los delitos tuvieron lugar en dos viviendas en las que residió el grupo familiar”.
El fiscal sostuvo que “el imputado agredió sexualmente a las hijas de su pareja y después las amenazó para que guardaran silencio sobre sus padecimientos”. En tal sentido, relató que “el hombre solía intimidarlas con un arma de fuego”, y destacó que “les aseguraba que si contaban lo ocurrido, nadie les iba a creer debido a la credibilidad pública que él decía tener”.
En relación a los ilícitos cometidos en perjuicio de una de las víctimas, el hombre investigado está imputado como autor de abuso sexual con acceso carnal doblemente agravado (por haber ocasionado un grave daño en la salud mental de la víctima y por haber sido cometido contra una menor de 18 años, aprovechado la situación de convivencia preexistente); abuso sexual gravemente ultrajante (por su duración y por las circunstancias de realización) y abuso sexual simple agravado (por ser cometido contra una menor de 18 años, aprovechando la situación de convivencia.
Por otro lado, por los ataques sexuales que perpetró contra la otra víctima, al hombre de 69 años se le endilgó la autoría de abuso sexual gravemente ultrajante (por su duración y por las circunstancias de su realización) y de abuso sexual simple agravado (por ser cometido contra una menor de 18 años, aprovechando la situación de convivencia.