Ciudad

Preocupación por los aumentos hasta el 40% en los kioscos de Rosario


Los comercios más chicos están en alerta debido a estas subas que hacen peligrar su futuro. CLG habló con Marcos Di Fillipo, presidente Cámara de Kiosqueros de Rosario, para conocer la realidad del sector

Por Mario Luzuriaga – Fotos Fernando Der Meguerditchian

En la última semana se pudo notar un aumento de precios en los kioscos que van desde un 10% a un 40%. Esto generó una alarma en el sector, ya que estas subas hace que la gente deje de comprar ciertas cosas y opten para adquirirlas en supermercados. Ante esta situación Marcos Di Fillipo, presidente Cámara de Kiosqueros de Rosario, habló con CLG sobre el contexto que transita este rubro.

Di Fillipo comentó que estas subas comienzan en los lácteos con un 10% y siguen con galletitas al 12%; gaseosas al 15%; cerveza línea Quilmes con un 15%; cerveza línea CCU se disparó al 40%. Aclaró que la línea CCU es la que comercializa marcas más importantes del mercado como Imperial, Santa Fe, Heineken, sidra 1888, entre otros. Además, indicó que se espera también un aumento del 10% en el precio del cigarrillos.

 

«Cuando los aumentos son del 10 o 15% podemos absorber parte de los mismos y podemos no trasladarlos para que no sean tan abruptos. Ahora con un 40% se nos hace imposible», apuntó el referente kioskero.

Contó que le enviaron un comunicado a Pablo Machado, jefe de ventas de la empresa CCU, para recibir una explicación del aumento de  todos sus productos. Sin embargo, aún esperan respuesta alguna, ya que ese porcentaje golpea fuerte y directamente a los comercios menores de Rosario.

 

Al ser consultado por el día a día que vive el sector y dijo: «El cliente no está enterado lo que pasa en trasfondo de los kioscos. Se encuentran que hay un 10 y un 15 % de aumento, pero lo que generan estas subas es sacarnos del mercado y que directamente la gente vaya a conseguirlos en los supermercados a un precio menor».

Comentó que hasta hace una semana vendían una lata de cerveza económica a 120 pesos y ahora lo que se debe abonar no baja de los 170 pesos, siempre dependiendo de la marca. Estos incrementos rutilantes disminuye las ventas diarias y los kioskos quedan en jaque ante la lista de precios de los proveedores.