El gremio de Vendedores Ambulantes de Rosario, Sivara, alertó que, como respuesta a la crisis, la venta ambulante creció de manera exponencial y, ante esto, esperan mejorar junto a la Municipalidad la regulación del sector.
El gremio aseguró que en Rosario existen al día unas 700 habilitaciones y están a la espera de unos 2500 permisos municipales para que personas ejerzan la actividad de venta ambulante.
Desde Sivara comentaron que si bien existen varias ferias funcionando que son organizadas por la Municipalidad, éstas se encuentran “en situación precaria», es decir, “no se cumplen normas de seguridad y leyes laborales como por ejemplo que los feriantes entren en categoría de monotributo». El gremio señaló que pretenden»colaborar en esta situación para pasar de la informalidad a la formalidad de muchos trabajadores”.
En ese sentido, Sivara participó de la última Conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), realizada recientemente en Ginebra, “donde expusimos sobre la informalidad en nuestro sector y la necesidad de ir revertiendo la situación”, detallaron.
En tanto a esto, el gremio pretende que el Estado Municipal haga regir el Convenio 204 de la OIT que precisamente la recomendación del organismo internacional para que se respeten todos los derechos laborales de los trabajadores
En dicho contexto, el Sivara viene gestionando una reunión con el flamante intendente electo, Pablo Javkin, para abordar la temática y que “como gremio podamos aportar todo lo necesario y estar predispuestos con la nueva gestión para brindar mejorías y mejores herramientas a nuestro sector”. El gremio pide la regularización de los trabajadores y contar con una base de datos específica que monitoree la actividad.
Con respecto a esto, el gremio arrojó datos alarmantes sobre la venta ambulante. «Creció un 250 por ciento el trabajo informal en la ciudad en el último tiempo debido a crisis económica”, sostuvieron.
El crecimiento de la informalidad inauguró un factor que retrotrae a otras épocas de crisis en el país. Los comerciantes de locales, “dejan de alquilar el lugar por sus altos costos y venden en la vía pública porque lo hace mas rentable”, según indicó su titular, Alberto Ribadero, conocido también como Beto Riba.
En ese punto, el gremio propone una nueva Ordenanza Municipal que regule la actividad de venta móvil en virtud de que “estamos en un escenario nuevo que surge en respuesta a la crisis económica y necesitamos un marco regulatorio actualizado para la actividad”, precisó el dirigente.
“Somos un gremio en crecimiento y queremos trabajar junto al Ejecutivo Municipal y, fundamentalmente, con los trabajadores para mejorar esta digna actividad que muchos realizan para generar sus recursos y vivir en dignidad”, planteó Ribadero, y agregó que, “estamos trabajando con los compañeros brindándole información sobre lo aprobado en la OIT sobre acoso laboral”.
En tanto a esto, Riba concluyó: “Los trabajadores deben interiorizarse en este tema y tener las herramientas para saber como actuar ante situaciones de este tipo”.