El diputado italiano Fabio Porta, representante de los italianos residentes en América del Sur, aseguró que el "gobierno odia a los italianos en el exterior”
El Parlamento italiano debate por estas horas un polémico decreto que restringe el derecho a la ciudadanía por descendencia y afecta de lleno a millones de personas en América del Sur, especialmente en Argentina. El llamado Decreto Tajani, que entró en vigencia el 28 de marzo, limita severamente las condiciones para acceder a la ciudadanía italiana iure sanguinis, generando un fuerte rechazo de organizaciones migrantes y del Partido Democrático (PD), principal fuerza de la oposición.
En diálogo con el medio InfoCivitano, el diputado italiano Fabio Porta —representante de los italianos residentes en América del Sur— fue categórico: “Este gobierno odia a los italianos en el exterior”. Porta adelantó que el PD no se rendirá y que dará pelea dentro del Parlamento para anular o modificar profundamente el decreto. “Es injusto, retroactivo y discriminatorio”, denunció.
El decreto limita el acceso a la ciudadanía a hijos o nietos de ciudadanos italianos nacidos en Italia, o a hijos de italianos nacidos en el exterior que hayan vivido al menos dos años en Italia antes del nacimiento del solicitante. Según Porta, esto excluye a una enorme mayoría de descendientes, incluso a quienes ya iniciaron trámites legales. También critica el uso de un decreto de necesidad y urgencia para regular una cuestión estructural, lo que viola —según juristas— principios constitucionales italianos.
Desde Rosario y otras ciudades argentinas donde hay fuerte presencia de comunidades italianas, el debate no es ajeno. “Miles de personas están siendo perjudicadas, no solo en lo simbólico: hablamos del acceso a la ciudadanía, a derechos, a oportunidades. Este gobierno quiere borrar de un plumazo la historia de millones de familias emigrantes”, señalaron desde entidades ligadas a la colectividad.
El PD presentó más de 40 enmiendas al decreto y exige su derogación. Porta explicó que no se trata de demagogia: “Representamos a 7 de los 12 parlamentarios elegidos en el exterior. No vamos a permitir este ataque a nuestros derechos”.
Además, desde el PD advierten que esta ofensiva contra la ciudadanía puede ser solo el comienzo. “El próximo paso podría ser limitar el voto o la representación parlamentaria de los italianos en el exterior”, alertó el legislador.
El decreto debe ser ratificado, modificado o anulado en el Parlamento antes del 27 de mayo. De lo contrario, quedará sin efecto. La cuenta regresiva ya empezó y la presión crece tanto dentro como fuera de Italia.
