El abogado Miguel Ángel Pierri, que patrocina al cantante Rubén Darío «El Pepo» Castiñeiras, advirtió hoy que el lugar donde se produjo el vuelco en el que el pasado sábado fallecieron dos personas «es inconducible», al tiempo que criticó a la fiscala que se hizo cargo de la causa tras el accidente.
«Lo que más nos importa ahora es si Pepo está en condiciones de salud, no solamente las físicas, sino también las espirituales y anímicas», sostuvo el letrado.
En declaraciones a la prensa, Pierri señaló que su objetivo es «tomar contacto con las actuaciones, ver quién está llevando adelante las pericias de laboratorio en cuanto a sangre y orina», a la vez que aprovechó para tildar de «inconducible» el lugar de la Ruta Provincial 63 en el que se produjo el vuelco de la camioneta Honda CRV blanca.
Asimismo, remarcó que apunta a mantener un encuentro con el fiscal Diego Bensi, quien se hará cargo del expediente en reemplazo de su par Verónica Raggio, que se tomó licencia.
«Vamos a hablar de la libertad del Pepo» con el nuevo fiscal del caso, subrayó el letrado. .
En referencia a las actuaciones de Raggio, Pierri consideró que «se equivocó al haberlo esposado al Pepo» y lanzó: «Nosotros tenemos que mantener esta causa en lo que dice la ley y lo que es el Código. El show que lo haga otro».
«Si el agravante lo planteó en base a una expectativa de culpabilidad más allá del sistema acusatorio, debe renunciar como fiscal. Si su notoriedad, ser figura pública, la sospecha, su condena previa, su estado penitenciario llevaron a la fiscal a disponer su detención y a iniciar una calificación que era grave, lo que tiene que hacer es renunciar», añadió.
El vuelco de la camioneta que, según sospecha la Justicia, conducía «el Pepo» se produjo en la madrugada del pasado sábado a la altura del partido bonaerense de Dolores: el trompetista Nicolás Carabajal y el manager Ignacio Abosalhee fallecieron, mientras que la corista Romina Cándias sufrió la fractura de una pierna y el cantante sólo sufrió escoriaciones en el rostro.
Ambos heridos fueron trasladados al Hospital San Roque de Dolores: Castiñeiras permanece allí, internado y con custodia policial.