Política y Economía

Pese a su encuentro con Larreta, Alberto Fernández tiene decidido mantener la suspensión de la educación presencial


Las nuevas medidas restrictivas serán publicadas este viernes en el Boletín Oficial. El jefe de Gobierno porteño ultima los detalles del amparo que presentará ante la Corte Suprema.

Aunque a regañadientes por las críticas que recibió por las severas medidas contra la suba de casos de coronavirus en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el presidente Alberto Fernández accedió a recibir al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, pero no hará modificaciones con respecto a la suspensión de clases por dos semanas en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que se está redactando por estas horas y que saldría publicado, sin cambios, antes de medianoche.

Fuentes oficiales adelantaron a Infobae que los anuncios del primer mandatario para la ciudad y la provincia de Buenos Aires se mantendrán tal cual los detalló el miércoles por la noche en un mensaje grabado en Olivos. Sobre todo, el punto sobre el que la administración porteña marcó los reparos más enfáticos, es decir, el freno a la educación presencial. “Las clases distancia por dos semanas no se negocian”, dijo una fuente del entorno del Presidente.

Según se informó desde la Casa Rosada, el jefe de Estado recibirá al alcalde porteño y dirigente del PRO para “retomar el método de diálogo”. Durante el encuentro, adelantaron fuentes oficiales, Alberto Fernández le pedirá a Rodríguez Larreta que ponga énfasis en los controles para el efectivo cumplimiento de la restricción de la circulación y las actividades recreativas en lugares cerrados. “Nosotros les vamos a garantizar las ayudas económicas, pero para eso, ellos tienen que hacer cumplir las medidas”, deslizó un funcionario nacional. El jueves, después del mensaje oficial, el primer mandatario detalló las medidas de auxilio para los sectores que se verán más golpeados.

La reunión con Rodríguez Larreta, que tendrá lugar el viernes a las 10 de la mañana en la Quinta de Olivos. Fue pautada a pedido del alcalde de la Ciudad, quien dijo en conferencia de prensa el jueves que no está de acuerdo con que se suspendan las clases en las aulas y adelantó que presentará un amparo ante la Corte Suprema. El gobierno porteño también mostró reparos con respecto a los controles de fuerzas federales en las calles de Buenos Aires para hacer cumplir las mayores restricciones.

El jefe de Gobierno porteño decidió resistir el toque de queda, el cierre de los comercios y, sobre todo, realizó una enfática defensa de las clases presenciales, que anunció de manera abrupta y sorpresiva el presidente Alberto Fernández. Rodríguez Larreta lanzó un duro discurso de rechazo al cierre de las escuelas ordenado por la Casa Rosada y aseguró que hará todo lo posible para garantizar que el próximo lunes -cuando empezará a regir el DNU- los estudiantes porteños estén en las aulas. En esa conferencia de prensa, solicitó una reunión urgente al Presidente para rever los anuncios.

Alberto Fernández dejó saber, a través de sus voceros, que recibirá al mandatario porteño para “retomar el método del diálogo” luego de los reproches que hizo Rodríguez Larreta públicamente sobre la falta de consulta con la sede de su gobierno. Pero remarcaron que no se planea dar marcha atrás con sus decisiones. Durante el jueves la secretaría Legal y Técnica, a cargo de Vilma Ibarra, redactaba el DNU que sería publicado por la noche. Allí, adelantaron las fuentes, se verá plasmado el toque de queda a partir de las 20 y hasta las 6; la suspensión de las clases presenciales desde el lunes 19 hasta el viernes 30 de abril; el freno de las actividades recreativas, sociales, culturales, deportivas y religiosas en lugares cerrados; y la restricción horaria de las actividades comerciales entre las 9 y las 19.