CLG dialogó con el cronista trasandino Rodrigo Fuentes, quien contó la realidad que viven. "Este descontento ha sido olvidado durante 30 años", explicó
Por Gonzalo Santamaría
Chile vive días caóticos. De tensión. Con protestas que arrancaron el viernes y se prolongaron a lo largo de la semana. Todo se inició cuando estudiantes de todos los niveles salieron a las calles a reclamar contra un incremento en el pasaje del subte y luego continuó con distintas manifestaciones que se centran en el sistema jubilatorio y la reforma tributaria que se está debatiendo en el congreso del país trasandino.
CLG dialogó con Rodrigo Fuentes, periodista de radio Universidad de Chile, que tiene su formato en diario digital que rápidamente dejó en claro que los días vividos en Chille son completamente “anormales”.
“La gente salió por la suba del subte pero esto desembocó en protestas que se vienen acarreando hace más de 30 años en el país”, puntualizó el periodista. Las protestas comenzaron en Santiago y en pocas horas se replicaron en otras ciudades importantes como Valparaíso y Concepción.
Para este miércoles se espera una huelga general en la capital de Chile. Y Fuentes aclaró: “Ésta se suma a la de los trabajadores portuarios que ya están paralizados en solidaridad con la gente que reclama en las calles por la inequidad social y económica”.
“Este descontento ha sido olvidado durante 30 años, sin importar el gobierno de turno”
Para Fuentes, el gobierno “se ha visto sobrepasado”: “Desde un primer momento ha salido a atacar a la gente que iba a protestar y sumado a la declaración del estado de excepción, algo que no se veía desde la dictadura”. El estado de excepción restringe la circulación en la vía pública desde las 19 hasta las 6, así como también a asociarse o manifestarse dentro de ese horario.
Fuentes expresó que las medidas en contra de las manifestaciones pacíficas y el mal manejo de comunicación llevaron al presidente Sebastián Piñera a retrotraer el aumento. “(Piñera) Dijo esto es una guerra y media hora más tarde el general de Ejército, Javir Iturriaga, a cargo de esto, ha dicho que no está en guerra con nadie y que está en paz junto a su familia”, expuso el chileno.
“Hay una serie de descoordinaciones comunicacionales del gobierno que hacen que estas declaraciones (NdR: las de Piñera) enfurezcan a la gente”, pero no dudó en sostener: “En realidad no es ninguna guerra”.
En este sentido aclaró: “Es un descontento social generalizado que no se había visto nunca en Chile, y nuestro país, en el extranjero, se muestra como un país modelo neoliberal“.
Rodrigo Fuentes fue muy explícito a la hora de graficar estas manifestaciones: “Al final era una olla a presión que explotó el viernes y todavía se nota en las calles de Santiago”.
Los militares han copado las calles para mantener la medida del presidente del estado de excepción pero, como contó Fuentes, es algo que las organizaciones sociales y de trabajadores no justifican ya que “no es un grupo específico que está comandando las protestas sino es algo espontáneo”.
Las marchas en Santiago comenzaron el viernes y luego pasaron al resto del país. La gente se concentra, no hay circulación de vehículos, y en las calles y plazas las cacerolas se hacen escuchar. Y si bien las diferentes organizaciones sociales y de trabajadores no han marchado por temor a la violencia militar. Según Fuentes, “el miércoles habrá un paro general, marcharán y se apoyarán entre todos”. Si bien hay manifestantes violentos, Fuentes prevé una gran marcha pacífica para la mitad de la semana.
La oposición política también dio su parecer ante las medidas de Piñera. “Algunos han sido moderados y criticaron el manejo del gobierno”, afirmó Fuentes, pero agregó: “Hay sectores de extrema derecha que han apoyado al gobierno en cuanto a sacar a los militares a la calle y la violencia sobre la violencia, apoyados por el ministro del interior, Andrés Chadwick Piñera, fiel defensor de la dictadura”.
También relató la postura de Renovación Nacional, que a pesar de ser oficialistas, se mostraron en contra de los sucesos y expresaron que al gobierno “se les ha escapado de las manos y debe moderar sus discursos”, según Fuentes.
El cronista de Radio Universidad de Chile contó que el Congreso chileno, siguiendo con esta idea, planea “una hoja de ruta” para superar la situación.
Todo se inició con el aumento del boleto del subte, pero como explicó Fuentes “hay otras reivindicaciones”: “Está el tema de las jubilaciones o de la reforma tributaria, donde la oposición llama a un acuerdo para solucionar estos temas que han explotado en el país”. Además, el periodista expuso que la reforma tributaria está en discusión ya que “beneficia a los sectores más ricos” y eso genera el descontento en la gente.
Rodrigo Fuentes fue claro con el desenlace de estas protestas: “No tiene solución a corto plazo, llevamos 4 días de movilizaciones y como las causas del problema son de larga historia no creo que se solucione a corto plazo”.
Asimismo definió como fundamental el “día a día” y que puede haber medidas efectivas para calmar las manifestaciones, aunque no cree que se “retome la calma de la semana pasada”.
Sobre el final de la charla con CLG fue certero y sentenció: “Nadie tiene en claro, ni el propio Piñera, qué está pasando acá”.