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Pedido desesperado de futbolista argentino: «Hasta me contagio el virus, pero quiero volver»


El defensor Sergio Vittor juega en Arabia Saudita, pero sólo piensa en regresar a la Argentina. "Pago lo que sea, hasta un vuelo privado para irme de acá", señaló

El zaguero Sergio Vittor, ex Independiente, Racing , Argentinos Juniors y Banfield, entre otros, pidió desde Arabia Saudita, donde se encuentra cumpliendo la cuarentena porque allí juega por el Damac FC, de la primera división local, a las autoridades correspondientes, «regresar a la Argentina», y afirmó que no le «importa pagar lo que sea en un vuelo privado» o hasta contagiarse «el coronavirus en el camino, con tal de volver».

Las medidas de restricción en Arabia Saudita y el cierre de las fronteras en Argentina le impidieron al ‘Chino’ Vittor, de 30 años, volver a su Argentina, aunque ya tiene permiso del club para hacerlo, luego de cumplir este lunes exactamente un mes de confinamiento.

«Mi esposa no llegó a viajar desde Buenos Aires. Por eso vivo solo en un complejo cerrado, construido por Estados Unidos para militares norteamericanos. Acá solo pueden entrar extranjeros, ni siquiera los árabes. Por eso quiero volver a la Argentina, y si me contagio de coronavirus en el camino no me importa, con tal de volver a mi país. A este punto llegué», le contó con desesperación a La Nación el platense que el próximo 9 de julio cumplirá 31 años.

«En Arabia estamos tres futbolistas argentinos, el ‘Colo’ [Leonardo] Gil (ex Estudiantes de La Plata y Rosario Central) , Cristian Guanca (ex Colón) y yo. El club ya me autorizó a que me vaya, pero queda en mí buscar la forma. Estamos tratando de conseguir un vuelo privado desde Jeddah, donde está Gil, hasta Madrid, y ahí enganchar algunos de los aviones de repatriación que manda el canciller Felipe Solá», indicó.

Vittor aclaró que los «vuelos privados salen fortunas, no cuestan dos pesos con cincuenta. Los tres coincidimos en que la plata mucho no nos interesa en este momento y ponemos lo que haga falta para irnos. En otra circunstancia lo pensaría, pero ahora no me importa: yo me quiero ir a la Argentina. Cuando pasa algo como esto del coronavirus, uno se da cuenta de que los más importante son los seres queridos».

«Por eso si mañana me dicen que tengo que pagar 20.000 dólares por un vuelo privado no me importa y lo pago con los ojos cerrados. Gil ya perdió como seis mil dólares en vuelos que se cancelaron. Estamos en contacto entre los tres para ver qué puede surgir. Por ahora no tenemos noticias. Si de la Argentina pueden darnos una mano estaría buenísimo. La embajada argentina de acá nos dice que está todo cerrado y que hay que esperar», comentó.

«Me vine a Arabia porque firmé el mejor contrato de mi carrera. Por mis proyectos económicos a futuro, porque ya tengo 30 años. No vine para conocer la cultura y cobrar dos pesos. Esa es la realidad. El que dice que viene por lo deportivo está mintiendo, porque acá el fútbol es una porquería. De todas formas, yo vine para hacerme un nombre en este mercado y quedarme varios años», destacó.

Entre esos proyectos económicos ya está en evolución una empresa constructora que tiene en La Plata, y desde allí donó una buena cantidad de mascarillas para un hospital en Ezeiza.

«Soy dueño de una empresa constructora en La Plata que manejan mis hermanos, y no les desconté nada de los sueldos a mis empleados. No puedo hacer eso como dueño. Me agradecieron y yo les dije que iba a cumplir lo que estaba firmado. Nadie iba a imaginar esta pandemia, pero siempre hay riesgo de que pasen cosas que afecten la solvencia económica y el propietario tiene que responder», alertó.

«Pero también debo ser justo con los árabes, porque antes del coronavirus estaba perfecto acá, ya que me trataron bárbaro. Por eso no pienso rescindir el contrato, ya que me cumplen en todo y no tengo ninguna queja, si bien es duro acostumbrarse a la cultura», finalizó un Vittor que clama por volver a su país.