El frente opositor, de la mano de Maximiliano Pullaro, se quedó con una contundente victoria que repercute de cara a las Primarias nacionales
Por Santiago Pérez Chiconi – Noticias Argentinas
Juntos por el Cambio, cuya denominación en la provincia fue Unidos para Cambiar Santa Fe, se anotó un contundente triunfo en las Paso de Santa Fe, el tercer distrito con mayor caudal de votos del país, y quedó cerca de desbancar al peronismo, como ya lo hizo meses atrás en San Luis y San Juan.
El aspirante a suceder al peronista Omar Perotti en Santa Fe, el radical Maximiliano Pullaro, aún debe triunfar en las elecciones generales de la provincia, pero su victoria en las primarias fue tan arrolladora que la contienda del 10 de septiembre comienza a verse casi como un mero trámite.
Pullaro deberá ahora terminar de encolumnar detrás de su candidatura a su rival interna Carolina Losada, después de las agresiones cruzadas en la campaña, y así avanzar en el sendero que lo haría ingresar el 10 de diciembre a la Casa Gris, sede del Gobierno santafesino.
Fuera de Santa Fe, su triunfo además redobló el ánimo de Juntos por el Cambio para las elecciones nacionales, que tienen una primera escala en las Paso del 13 de agosto.
Sucede que en el cronograma electoral los primeros comicios que se desdoblaron fueron triunfos del peronismo, pero luego las victorias de la oposición, primero en San Luis y posteriormente en San Juan, desplazando al peronismo que llevaba varios mandatos controlando ambas provincias, comienzan a generar una ola que entusiasma a JxC para la contienda nacional.
Santa Fe era la última provincia importante que tenía su turno electoral antes de las Paso nacionales y el triunfo de la coalición opositora era esperable, pero lo que terminó sorprendiendo fue la amplia diferencia del resultado, que JxC espera replicar el 13 de agosto, el 10 de septiembre y, claro está, en las generales nacionales de octubre.
Con este escenario, se confirma que el peronismo cada vez depende más de hacer una buena elección en la estratégica Provincia de Buenos Aires para tener chances en las presidenciales, ya que las demás provincias grandes no parecen augurarle buenas noticias.