"Hace 15 meses que pedimos dialogar con las autoridades y no nos han llamado", dijo Alberto Botto, secretario general del gremio
Este miércoles 9 de abril, el Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario lleva adelante un paro de actividades por 24 horas en reclamo por la falta de diálogo con las autoridades de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y en denuncia por la grave situación salarial que atraviesan los trabajadores del sector. La medida de fuerza, que cuenta con el respaldo de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza (Fatlyf), se realiza con asistencia a los lugares de trabajo, pero sin atención al público ni tareas operativas habituales.
El gremio garantiza guardias mínimas para casos de emergencia, usuarios electrodependientes y efectores de salud, aunque el resto de los servicios permanece interrumpido durante toda la jornada.
“Hace 15 meses que pedimos dialogar con las autoridades y no nos han llamado. Muchos compañeros están hoy por debajo de la línea de pobreza y no nos han convocado a discutir paritarias”, señaló el secretario general del sindicato, Alberto Botto, al anunciar la medida en los días previos.
Desde la conducción sindical remarcaron que el reclamo no es nuevo y que se han agotado todas las instancias posibles para entablar una mesa de negociación. En ese sentido, recordaron que la EPE otorgó el último aumento de manera unilateral, replicando el esquema salarial general del resto de los trabajadores estatales sin abrir el espacio paritario correspondiente.
“El Gobierno provincial tiene que entender que no estamos dispuestos a seguir perdiendo poder adquisitivo mientras los precios suben todos los días”, declaró hoy Leonardo Passerini, secretario gremial de Luz y Fuerza Rosario. “Nuestros salarios están en crisis y no se puede seguir con una empresa que mira para otro lado ante la situación de su propia gente. Hoy tenemos compañeros con más de 20 años de servicio que no llegan a fin de mes. Por eso paramos, porque el silencio no puede ser la respuesta a tanto esfuerzo”, agregó.
La medida fue decidida en una serie de plenarios realizados durante la última semana, donde delegados y delegadas coincidieron en la necesidad de visibilizar el deterioro salarial, la precarización creciente en las condiciones de trabajo y la falta de respuestas concretas por parte del directorio de la empresa.
Desde Luz y Fuerza reiteraron que el objetivo del paro no es solo discutir salarios, sino instalar un diálogo estructural sobre el futuro de la empresa pública, que hoy enfrenta tensiones internas y un complejo panorama frente al ajuste general que atraviesa al país.
