Política y Economía

Para la UIA, el proyecto de ley de Etiquetado Frontal es «demonizador»


"Hay muchos modelos en el mundo sobre este tema: el proyecto que se viene discutiendo sigue el chileno, que no es de información sino demonización", sostuvo Daniel Funes de Rioja

El presidente de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, tildó este viernes de «demonizador» el proyecto de ley de Etiquetado Frontal impulsado por el Gobierno y que no pudo ser debatido en Diputados por falta de quórum.

«Hay muchos modelos en el mundo sobre este tema: el proyecto que se viene discutiendo sigue el chileno, que no es de información sino demonización», sostuvo el titular de la central fabril.

Sin embargo, el dirigente aclaró que esa entidad no se opone a una legislación que establezca parámetros definidos para brindar información al consumidor sobre los productos alimenticios que está adquiriendo.

La iniciativa, que cuenta con media sanción del Senado, apunta a informar a los consumidores la presencia en alimentos y bebidas de altos niveles de grasas, sodio, azúcares y calorías, pero no pudo debatirse en Diputados porque el oficialismo reunió 122 legisladores, 7 menos del quórum necesario.

«No estamos en contra de una ley de Etiquetado. Hace 10 años firmamos acuerdos para la eliminación de grasas trans en alimentos», sostuvo el dirigente en declaraciones radiales.

Señaló que hay tres funciones básicas que se deben impulsar: la información, la educación y la comunicación, para mejorar el nivel alimenticio de los consumidores.

Ley de Etiquetado Frontal ¿por qué es importante su aprobación?

Funes de Rioja manifestó su apoyo a que el proceso de etiquetado tenga como base al Mercosur y consideró que «sería importante porque somos economías interdependientes».

«Ese sería un modelo de advertencia, de brindar información, porque si ponen etiquetados negros eso tiene otra simbología, es más de infracción», añadió el empresario.

El proyecto, que no pudo ser debatido el martes pasado, advierte a consumidores sobre los excesos de componentes como azúcares, sodio, grasas saturadas, grasas totales.

Está orientado a fabricantes, fraccionadores y envasadores que distribuyan, comercialicen o importen, que hayan puesto su marca o integren la cadena de comercialización de alimentos y bebidas analcohólicas de consumo humano, en todo el territorio de la República Argentina.

Establece que los alimentos y bebidas analcohólicas envasados y comercializados en la Argentina deben tener colocadas leyendas como: «Exceso en azúcares», «Exceso en sodio», «Exceso en grasas saturadas», «Exceso en grasas totales», y/o «Exceso en calorías».

Uno de los puntos más cuestionados por los empresarios es que el sello adoptará la forma de octógonos de color negro con borde y letras de color blanco en mayúsculas.