Por: Enrique Genovar
No se puede. Con errores infantiles como el de Patricio Cucchi, no se puede. En un fútbol argentino muy parejo cometer yerro de conceptos tan fundamentales te dejan afuera de cualquier chance. Y esto es lo que le pasó a Central. El Canalla lo tenía y contaba de a tres, pero otra vez se volvió a equivocar y el rival sacó un tiro libre de magnífica ejecución y empató el partido.
Fue un encuentro bueno el que hizo el equipo del Kily. Pero siempre le falta algo. Y ese algo es el que hoy lo aleja de la clasificación que tiene como objetivo.
Central ante los santiagueños hizo todo el desgaste. En un partido parejo fue el Canalla el que siempre lo fue a buscar y cuando parecía que la victoria estaba asegurada Cucchi no entendió lo que pedía la jugada y terminó siendo responsable del empate del rival.
El equipo del Kily tenía que ganar porque así se lo exigía la tabla de posiciones y no lo hizo. Y ese no hacer lo pone en una situación bastante incómoda cuando todavía quedan 18 puntos en disputa.
Un buen primer tiempo fue el que tuvo Central. Más allá de que le costó desentrañar la propuesta del práctico equipo santiagueño fue quien impuso condiciones durante más tiempo en toda la primera parte. Un primer tiempo que se fue ganando gracias al gol de Ruben, de penal, luego de que bajaran a Marínez en el área quien intentaba dominar un gran pase de Ávila.
Pero en el complemento, a pesar de que lo ganaba 2-1, el partido pedía otra cosa. Defenderse con la pelota, luchar la mitad de la cancha como al principio. Y en esa tenencia de balón estuvo la falla del conjunto canalla. En los últimos minutos jugó al golpe por golpe, un error conceptual de un equipo que está en ventaja. Así y todo los tres puntos quedaban en Arroyito…
Cucchi, un jugador voluntarioso, tuvo luz verde para salir a jugar. Arriba no aguantó ni una, y encima cuando la jugada requería un rechazo de él quiso salir jugando, le perdió y al uruguayo Rabuñal no le quedó otra que cometer una infracción al borde del área. Después, un categórico tiro libre dejó a Central repartiendo puntos ante un rival que terminó sumando y salvando así la distancia con el Canalla.
Otro error. Un nuevo error individual, un yerro conceptual inaceptable que provocó que Central no solamente no sume de a tres, sino que hizo hipotecar la chance de lograr terminar esta primera parte parte de torneo entre los primeros cuatro de la zona.