Por José Odisio
Por José Odisio
Nada es fácil para Newell’s. Todo cuesta, nadie le regala nada y para peor, cuando la Lepra regala casi siempre lo paga. El envión que provocó el triunfo frente a Talleres no alcanzó. La expulsión tempranera de Cristaldo puso un partido parejo cuesta arriba, y cuando parecía que alcanzaba con Lema y Aguerre para el aguante, un error de Giani al cometer una falta tonta cerca del área le abrió al Bicho la chance de victoria, y el gol de Villalba fue un castigo que duele, porque frena un impulso anímico que le venía bárbaro al ciclo Gamboa.
Para peor, entre Baliño y el línea inventaron un off side de un saque de arco con cabezazo de un rival que pudo ser el empate leproso. Como para redondear un lunes muy lunes, de esos que es mejor dejar atrás rápido y enfocarse en Estudiantes, que está a sólo tres días de distancia.
Hay buenas y malas, individuales y colectivas. Lema está recuperando nivel, Aguerre sostuvo y alejó críticas extremas de denostadores seriales, el pibe Mansilla se acomoda de a poco y Nico Castro entusiasma. Pero también hay bajos difíciles de sostener, como Bittolo, Sordo e incluso un Sforza que le cuesta jugar de Fernández y pierde su esencia al intentar ser lo que no es.
Lo de Cristaldo fue irresponsable, pero tiene más que ver con el ímpetu y las ganas, aunque dejó a Newell’s con diez y fue fatal.
Hubo carácter, faltó futbol. Hay orden táctico, aunque esta vez faltaron ideas en ofensiva. Pero no hay que dejar de lado que este Argentinos hace una semana peleó de igual a igual con River. Y Newell’s hace un mes no podía hacerle partido a Sarmiento. Hay mejoras, aunque falta.
¿Se puede esperar más de Newell’s? Seguro que sí, aunque Gamboa deberá encontrar el once ideal, para afirmar un equipo y sus ideas. Tal vez cuando tenga a Pérez y Fernández, más Scocco y Maxi. Y ese refuerzo que falta, empiece a darle forma a su idea. Por ahora hay señales interesantes, aunque parecen ideas sueltas, que comparadas con el pasado reciente es un montón, pero sería un gran error conformarse sólo con las ganas y una mejor imagen que el desteñido equipo de Burgos.
Ni con Talleres era el Chelsea, ni con Argentinos es el peor del mundo. Aunque es real que a Newell’s, producto de un semestre falso, muchos hinchas no le perdonan nada. Reconquistarlos será difícil, aunque Gamboa no deberá detenerse en eso, su misión será que Newell’s sea un equipo serio. Y en eso está.