Por Enrique Genovar
Por Enrique Genovar
El clásico para Central es desde hace ya varios años una situación de disfrute. Es que el Canalla viene con una racha muy importante por sobre su rival de toda la vida. Pero en esta oportunidad el partido o mejor dicho, si el resultado es positivo, debe servirle además como un mojón para comenzar a cosechar puntos en el torneo local.
Central está obligado siempre a sumar de a tres ante Newell’s. Si bien el rival, por lo que viene sucediendo en los juegos clásicos, parece estar más obligado; la obligación de ganar está presente.
Se habló muy poco de fútbol en esta semana que terminará este domingo a las 15.45. Es que, lamentablemente para la fiesta que significa este partido para la ciudad, se hizo hincapié en la designación por consenso de Andrés Merlos. Claro está que el árbitro no es del agrado de los jugadores y el cuerpo técnico, así lo dejó en claro con sus declaraciones Marco Ruben. Ojalá que el juez tenga un buen desempeño y no se hable de él una vez que culmine la acción en el Parque Independencia.
En lo futbolístico, el equipo del Kily llega de la peor manera en cuanto a resultados. Solamente ganó un partido en el torneo, fue eliminado de la Sudamericana días atrás y lleva seis caídas de manera consecutiva entre campeonato y torneo internacional. Pero el equipo, en Brasil, demostró cosas muy interesantes y principalmente dejó un signo de vida muy importante. Central no está muerto deportivamente hablando y eso en un equipo que hace rato que no logra ganar es loable.
El Canalla sigue vivo. Los jugadores respaldan al entrenador y más allá de los malos resultados se ve una idea de juego.
Será un partido bravo, como todos los clásicos. Un encuentro que exhortará al Kily y a sus colaboradores encontrar variantes de juego, más de las que tiene habitualmente. Es que el equipo de Gamboa seguramente tendrá un cuidado riguroso sobre Vecchio y es ahí donde el Canalla tendrá que ponerse a trabajar para encontrar otros protagonistas que generen fútbol. Muchas veces se ha visto en este segundo semestre que cuando el 10 es marcado de manera férrea o no tiene un buen día, Central se queda sin ideas. Por eso es muy importante en este juego el hecho de que pueda estar Gamba. El mendocino es clave en este equipo, es un generador de juego y de peligro muy interesante. Además, será fundamental lo que puedan hacer Ferreyra y Zabala por los costados para alcanzarle la pelota al as de espadas del equipo, Marco Ruben.
Por supuesto que también deberá tener cuidado en varios aspectos. La defensa, si bien en Brasil tuvo un buen rendimiento, ha tenido más defectos que aciertos en lo que va del semestre. Una desatención, un yerro no forzado podrá ser fatal en un partido de estas características. No cometer infracciones cerca del área; marcar con recelo a Lema y a Mansilla, entre otros, en la pelota detenida serán las tareas primordiales de la defensa auriazul.
Un partido lleno de condimentos extras es el que se viene. Un encuentro que marcará un antes y un después, como todo clásico. Un compromiso donde el Canalla está obligado a sumar para salir de esta racha negativa que atraviesa y para continuar mandando en el historial con su rival de toda la vida.