Agentes de la Secretaría de Control y Convivencia estuvieron abocados a fiscalizar y controlar el desarrollo pacífico de la tradicional celebración juvenil
La Municipalidad de Rosario, a través de la Secretaría de Control y Convivencia, dispuso un operativo especial por el último primer día (UPD) de clases, la habitual jornada de celebración que tiene como protagonistas a jóvenes que cursan el último año de secundaria en cada inicio del ciclo lectivo. Aunque muchas instituciones no comenzaban sus clases hoy, mayoritariamente las y los alumnos de grados superiores que ya tenían organizados sus festejos los llevaron a cabo de igual manera.
El acompañamiento comenzó a partir de la noche de ayer (domingo) y durante las primeras horas de la mañana de este lunes 4 de marzo. Agentes de la Secretaría de Control y Convivencia estuvieron distribuidos en distintos puntos de la ciudad para fiscalizar que no haya negocios que vendan alcohol a menores o después de las 23, y para prevenir la generación de ruidos molestos.
Durante la madrugada los agentes de control patrullaron con apoyo policial las principales avenidas y calles donde se emplazan los colegios de la ciudad.
A su vez, se recibieron muy pocas denuncias por ruidos molestos a través de la línea 147 en clubes de la zona sudoeste, noroeste y norte: en Argenper, de Andrade al 1900; Camino de los Granaderos entre Ciudadela y Cullen y Ugarte, y en Acevedo al 500, donde se reunieron jóvenes junto a sus padres y a través del diálogo se solicitó bajar el volumen de la música y mantener el orden de la celebración, dando por finalizados los festejos de la mejor manera.
No se secuestraron bebidas alcohólicas en la vía pública; sólo algunas unidades de pirotecnia en los festejos realizados en la zona de Bv. Oroño y Córdoba.
Se espera que las y los jóvenes continúen sus festejos más tarde en el Monumento como epicentro, donde agentes de Control continuarán trabajando en la prevención, en tanto personal municipal hará lo propio en lo relacionado con la hidratación y las normas de convivencia.
Al respecto, el secretario de Control y Convivencia, Diego Herrera, aseguró: “Arrancamos a principios de febrero el diálogo con directivos de diferentes colegios, padres y alumnos, a través de los centros de estudiantes. La idea fue hacer un trabajo en conjunto y ahí surgieron un montón de iniciativas muy positivas siempre en pos de mantener un festejo seguro y cuidado, preservando la buena convivencia”. Y agregó: “Brindamos contención, acompañamiento y colocamos puntos de hidratación, trabajando articuladamente con otras áreas del municipio”.
Un festejo seguro y cuidado con las y los jóvenes como protagonistas
Centenares de chicas y chicos de alrededor de 15 distintas instituciones de las zonas norte, sur, centro y noroeste de la ciudad se reunieron para celebrar el UPD en diferentes espacios y puntos de encuentro.
En este marco, equipos de la Secretaría de Control y Convivencia y del Distrito Centro, junto con la Agencia Local de Prevención y Abordajes de Consumos Problemáticos, asistieron a las y los jóvenes brindando acompañamiento y contención en distintos lugares, incluyendo la peatonal Córdoba y el Monumento Nacional a la Bandera. En esta línea, se establecieron puntos de hidratación a lo largo del recorrido.
Diálogo y presencia previa
Días antes a la celebración, en el Distrito Centro, directivos, docentes, estudiantes de 5° y 6° año de escuelas secundarias públicas y privadas de la ciudad, acompañados por familiares, participaron de un taller de reflexión para trabajar la promoción de hábitos de cuidados y consumo responsable.
Organizado por la Municipalidad, a través de la Agencia Local de Prevención y Abordajes de Consumos Problemáticos, y con la participación del Fondo de Asistencia Educativa (FAE) y la Secretaría de Control y Convivencia, el encuentro invitó a reflexionar sobre las festividades juveniles y los modos de cuidado entre pares.