Lo confirmó el vocero del organismo multilateral en Washington, Guerry Rice
El gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI) comenzaron oficialmente las negociaciones para un nuevo acuerdo crediticio que refinancie la deuda del país con el organismo.
Así lo confirmó en una conferencia de prensa este jueves el vocero del organismo multilateral en Washington, Guerry Rice.
«Estamos en las etapas iniciales de nuestro diálogo constructivo con el gobierno argentino sobre un nuevo programa respaldado por el FMI», dijo Rice a la prensa acreditada allí. Y agregó: «Compartimos sus objetivos de estabilizar la economía mediante el desarrollo de planes que respaldarán la recuperación, fomentarán la resiliencia y ayudarán Argentina luchar contra la pandemia».
La semana pasada, el ministro de Economía, Martín Guzmán, había afirmado que espera «responsabilidad y entendimiento» en las negociaciones con el FMI y señaló que la refinanciación de esa deuda superior a 44.000 millones de dólares, terminará de poner «en orden las finanzas públicas».
«Esperamos tener con el FMI negociaciones basadas en la responsabilidad y el entendimiento de cuál es la situación de Argentina hoy», señaló el ministro al participar en una reunión del Foro Europeo Alpbach, una plataforma interdisciplinaria para la ciencia, la política, los negocios y la cultura europea, junto al Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz.
Y el miércoles último, en la conferencia organizada por la Alianza de Investigación Global para Finanzas Sostenibles (GRASFI), Guzmán debatió el rol del Estado en el diseño de las finanzas y la inversión sostenibles en tiempos de COVID y también envió mensajes al organismo.
«Miramos la sostenibilidad en términos amplios, comenzando por la sostenibilidad social, la sostenibilidad económica. Estamos en un contexto en el que existen delicadas disyuntivas», dijo el funcionario en referencia al impacto de la pandemia en el país.
Además, señaló que Argentina históricamente ha sufrido crisis recurrentes de balanza de pagos, por lo que uno de los objetivos de la gestión de Alberto Fernández es ponerle fin a ese proceso generando capacidad de pago en el país vía crecimiento económico.