Hubo protestas en distintas ciudades del país, con una fuerte concentración en la puerta de la residencia oficial del Premier
Miles de ciudadanos salieron este sábado a las calles de varias ciudades de Israel, por décimo sábado consecutivo, para protestar contra el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y pedir su renuncia, informó la prensa local e internacional.
Las manifestaciones principales volvieron a producirse ante la residencia oficial del funcionario, en Jerusalén, donde se congregaron unas 20.000 personas según el diario local Haaretz, pero también hubo demostraciones en otras ciudades.
Asimismo, la policía desplegó un nutrido operativo de seguridad ante la posibilidad de que la movilización fuera -como en efecto sucedió- muy concurrida, según la agencia de noticias EFE.
La precaución obedeció a la polémica derivada de las protestas de la semana pasada, en las que hubo varios episodios de violencia y acusaciones de uso excesivo de la fuerza por parte de agentes policiales.
Quienes piden la dimisión de Netanyahu critican su gestión de la pandemia de coronavirus en medio de una fuerte segunda ola de contagios y un alza de la tasa de desempleo por encima de 20%, así como el hecho de que está procesado por corrupción.
Asimismo, en las últimas semanas el premier fue cuestionado por el reciente acuerdo firmado con Emiratos Árabes Unidos, la demora en ejecutar su plan de anexar unos asentamientos en Cisjordania -por lo que Netanyahu responsabilizó a Estados Unidos- y la sospecha de que intentó forzar un llamado a elecciones tras algunos desacuerdos dentro de la coalición gobernante.