Miles de hinchas rojinegros alentaron a los jugadores en la previa del clásico y pidieron: "El domingo cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar"
El fútbol es mucho más que once jugadores y la pelota. El fútbol es fútbol porque vibra en el corazón de los hinchas. El fútbol está allí donde hay un sentimiento hecho color y camiseta, el fútbol vive en ese padre que va caminando tomado de la mano con su hijo rumbo al estadio, o en los amigos que van cantando dando rienda suelta al amor por el equipo. El fútbol es la familia reunida frente a la pantalla y enlazada por el mismo sentimiento.
El fútbol es alegría y es tristeza, es emoción sublimada, es esperanza y un apasionante oasis en medio del desierto que a veces es la vida.
El fútbol es el rito, como el ya legendario Banderazo rojinegro, que inauguró hace ya tiempo, una hinchada enamorada. Banderas rojinegras, luces, fuegos y el grito de aliento que brota de miles de corazones apasionados.
En la noche de este jueves santo, en el Coloso del Parque Independencia se vivió la mejor previa del clásico: miles de almas rojinegras apoyaron al plantel de Gabriel Heinze y repitieron en cada grito «… que el domingo cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar».
Una gran cantidad de simpatizantes ocuparon el estadio mientras los jugadores ingresaron al campo de juego acompañados por el DT Heinze, quien luego, lleno de emoción, se corrió para que disfruten y se llenen de energía los futbolistas.
La previa
Desde temprano, los simpatizantes leprosos se fueron acercando al estadio para brindarle su apoyo al plantel que comanda Heinze. Un ritual que lleva 27 años de vigencia.
Como siempre, el ojo y la lente de Juan José “Tatín” García captaron el momento en la previa y en el durante y lo hicieron obra de arte.