La Lepra ganó 1-0 como visitante y se quedó con el título de Primera División a una fecha del cierre del torneo. Es el primer equipo del interior en lograrlo.
El fútbol femenino de Newell’s vivió este viernes una jornada inolvidable. El equipo rojinegro se impuso por 1 a 0 ante Rosario Central en el clásico jugado en el predio de Cristalería y se coronó campeón del torneo de Primera División de AFA, convirtiéndose en el primer club del interior del país en lograr un título oficial de liga en la máxima categoría.
Con este triunfo, el conjunto dirigido por Leandro “Toti” Iglesias sumó su segundo campeonato en apenas 45 días, ya que a comienzos de abril se había adjudicado la Copa Federal tras vencer a Boca en la final.
El gol del título llegó en el cierre del primer tiempo, cuando Mariana Larroquette, una de las grandes figuras del certamen, sacó un remate cruzado desde la izquierda que se metió junto al segundo palo, dejando sin respuestas a la arquera canalla Paulina Aprile. El tanto fue suficiente para que la Lepra sacara la diferencia definitiva y diera la vuelta olímpica en terreno rival.
Newell’s necesitaba al menos un empate para consagrarse campeonas, ya que llegaba al partido con 6 puntos de ventaja sobre Belgrano con solo dos fechas por disputarse. Sin embargo, el equipo fue por más y dominó el encuentro de principio a fin. La ventaja podría haber sido más amplia, pero la falta de puntería mantuvo el suspenso hasta el último minuto.
En el tramo final, la arquera leprosa Rengifo fue expulsada tras cortar una contra fuera del área, pero ni siquiera eso le permitió a Central encontrar el empate. El tiro libre posterior fue controlado y no hubo más oportunidades para el local.
Con esta victoria, Newell’s alcanzó los 40 puntos producto de 13 victorias, un empate y una sola derrota, en una campaña arrolladora. Además, se quedó con la serie histórica de clásicos femeninos en AFA: ganó 2 de los 3 disputados, mientras que Central solo se impuso en uno.
El contraste con el presente del conjunto auriazul es notorio. El equipo ahora dirigido por Maximiliano Blanco no solo quedó relegado en el clásico sino que marcha último en la tabla, con apenas 4 unidades en toda la temporada.
La fiesta fue rojinegra en Cristalería. Con autoridad, fútbol y coraje, Newell’s celebró en la cancha rival un título que quedará grabado en la historia del fútbol argentino.