El registro marca un hito para el sistema de Áreas Naturales Protegidas
Un gato montés, un zorro colorado y un zorrino patagónico fueron registrados recientemente en el Área Natural Protegida Copahue. El hallazgo, clave para la naturaleza, se logró gracias a un sistema de monitoreo con cámaras trampa instaladas en el marco de la política de conservación de la provincia del Neuquén.
El registro marca un hito para el sistema de Áreas Naturales Protegidas, ya que es el primero desde su integración a la Secretaría de Ambiente y Recursos Naturales. El monitoreo sin intervención humana directa representa un avance significativo en la protección de la biodiversidad.
Estas imágenes son una prueba clara de la riqueza natural de la región y ofrecen datos esenciales para el diseño de estrategias de conservación más eficaces. La presencia de estas especies refleja el buen estado de los ecosistemas que habitan.
Las autoridades ambientales destacaron la importancia para la naturaleza de continuar con estos estudios, que permiten entender mejor cómo se comporta la fauna silvestre en su entorno natural.

Monitoreo pasivo, conocimiento activo
Las cámaras trampa funcionan con sensores que detectan el calor y el movimiento, lo que permite obtener registros automáticos de animales sin perturbarlos. Esta tecnología es clave para observar especies solitarias, nocturnas o difíciles de detectar.
Además de generar conocimiento científico, el monitoreo fortalece las decisiones de manejo en las áreas protegidas. También cumple una función educativa, acercando a la comunidad a su patrimonio natural y sensibilizando sobre su cuidado.
Las tres especies registradas cumplen roles esenciales para la naturaleza. El zorro colorado actúa como predador y carroñero, el gato montés controla poblaciones de roedores y reptiles, y el zorrino patagónico recicla materia orgánica y dispersa semillas.
Con esta iniciativa, la provincia avanza hacia una gestión territorial más integrada, en la que el equilibrio entre naturaleza y desarrollo es cada vez más posible.

Guardianes silenciosos de la naturaleza
Las tres especies recientemente registradas en el ANP Copahue desempeñan funciones ecológicas clave en los ambientes naturales del sur argentino. Cada una, desde su comportamiento y dieta, contribuye al equilibrio de los ecosistemas donde habita.
El zorro colorado actúa como regulador de poblaciones de roedores, aves y otros pequeños animales. También cumple un papel como carroñero, ayudando a limpiar el ambiente y a controlar enfermedades.
El gato montés, felino solitario y sigiloso, es un predador tope en su nicho. Su presencia indica buena salud ambiental, ya que necesita territorios amplios, bien conservados y con presas disponibles. Ayuda a mantener el control biológico sobre reptiles y pequeños mamíferos.
El zorrino patagónico, por su parte, cumple tareas de “reciclador natural”. Al ser omnívoro, dispersa semillas, controla insectos y colabora con la descomposición de materia orgánica. Es una especie infravalorada pero esencial para mantener la biodiversidad en zonas de transición entre estepa y bosque. Su conservación es fundamental para sostener los procesos ecológicos que aseguran la vida en los paisajes patagónicos.