El controvertido juez norteamericano Thomas Griesa, que con sus fallos por la deuda puso a la Argentina contra las cuerdas durante años, falleció hoy en los Estados Unidos a los 87 años de edad.
Griesa llegó a dictar sentencia en casi todas las demandas iniciadas contra la Argentina por organizaciones de ahorristas y por los denominados fondos buitres, quienes tenían en su poder bonos argentinos que no habían ingresado a los canjes de 2005 y 2010.
Desde junio pasado, el magistrado se había jubilado por padecer graves problemas de salud y los casos que llevaba su juzgado pasaron a Loretta Preska, quien también instruye la demanda por la expropiación de YPF.