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Murieron por coronavirus un enfermero y un joven de 23 años: hay 131 fallecidos


Los decesos tuvieron lugar en provincia de Buenos Aires. Ambas víctimas integraban grupos de riesgo

Este sábado se confirmaron dos nuevas muertes por coronavirus covid-19 en el país y ya son 131 las víctimas letales de la enfermedad. Se trata de un enfermero de 47 años, primer fallecido dentro del sistema de salud de la provincia de Buenos Aires, y de otro joven de 23 años, el de menor edad registrado al momento.

Según se indicó, el joven murió en la localidad bonaerense de San Miguel. Estaba internado en el Hospital San Miguel Arcángel y era considerado paciente de riesgo, ya que anteriormente había padecido problemas pulmonares y estaba bajo tratamiento inmunosupresor, con lo cual su sistema inmune estaba debilitado. Es la víctima fatal más joven registrada en Argentina hasta el momento.

La información de ese fallecimiento la dio a conocer la secretaría de Salud del Municipio: «Lamentamos informar que esta mañana falleció un vecino de 23 años con coronavirus. Anteriormente había sido trasplantado y se encontraba inmunosuprimido, internado en el Hospital San Miguel Arcángel. Acompañamos en el dolor a su familia y seres queridos”, expresaron a través de un comunicado.

Según se supo, la víctima había recibido hace algunos años un trasplante de riñón y había sufrido un cuadro de neumonía. De acuerdo a su familia, el contagio pudo haber sido por medio de un contacto estrecho.

El último fin de semana el joven empezó a sentirse mal y el domingo pasado fue internado y esta mañana su cuerpo ya no resistió y falleció.

En cuanto al enfermero, se confirmó que falleció en el Hospital Regional “Néstor Kirchner” de Cañuelas. Se había infectado de covid-19 en el Instituto Médico Brandsen, lugar donde desempeñaba su actividad profesional y que es investigado por presuntamente no cumplir los protocolos correspondientes.

Fue identificado como Silvio Cufré, quien vivía en Alejandro Korn, trabajaba en el Instituto Médico de Brandsen, el cual fue clausurado tras la muerte del padre y abuelo del futbolista Walter Montillo, ante las sospechas que se intentó ocultar uno de los casos.

El hombre se encontraba internado desde el 7 de abril pasado en el Hospital Regional de la Cuenca Alta de Cañuelas y el 11 le diagonisticaron la infección con Covid-19. Enseguida el cuadro del enfermero, que sufría de hipertensión y obsesidad, se agravó y fue asistido con respirador mecánico.

La información fue confirmada por el Municipio de San Vicente, que señaló que «la tragedia de la muerte del enfermero Silvio Cufré es un golpe muy fuerte para todos». «Ellos, los agentes de salud, la primera línea de fuego, los que arriesgan su vida, por cuidar la de todos y todas, hoy lloran a un héroe», indicó el municipio en un comunicado.

En la clínica donde trabajaba murieron a principio de este mes y en una semana, el padre y el abuelo del futbolista Walter Montillo, ex jugador de Tigre y San Lorenzo y que actualmente juega en un equipo chileno.

A raíz de los fallecimientos de Walter (60) y Oscar Montillo (91) la justicia allanó el Instituto Médico Brandsen luego de haber sido denunciados por las autoridades municipales de esa ciudad, acusados de “fraguar el diagnostico en el certificado de defunción de Walter Montillo”, padre del futbolista, ocultando la verdadera causa de muerte.

Lo cierto es que si se comprueba que en dicha clínica no se tomaron las correspondientes medidas sanitarias ante los casos de COVID-19, la muerte del enfermero Silvio Cufré, será un caso más provocado por la negligencia y falta de recaudos tomados por las autoridades del instituto médico de Brandsen.