Se trata de los estudios toxicológicos y histopatológicos. Continúa la investigación para saber si hubo negligencia en el tratamiento del Diez
La sangre, la orina y los hisopados que fueron tomados en la operación de autopsia y hasta el corazón completo de Diego Armando Maradona, cuyo peso fue del doble de uno normal, comenzarán mañana a ser analizados en distintos laboratorios como parte de los peritajes complementarios solicitados por los médicos forenses que hicieron la necropsia.
Se trata de los estudios toxicológicos, mediante los cuales se buscará determinar si Maradona tenía rastros de haber consumido alcohol, drogas o alguna otra sustancia en las horas previas a su muerte, y de los histopatológicos, que son aquellos que estudian en forma microscópica los órganos y tejidos.
Fuentes judiciales y vinculadas a la investigación indicaron a la agencia de noticias Télam que anoche se terminó de definir que no todos los estudios se hagan en un mismo sitio.
La mayoría de los peritajes comenzarán mañana a las 8 en la sede central de la Superintendencia de Policía Científica de la policía bonaerense en la ciudad de La Plata, ubicada en avenida 52 y calle 117.
Quienes viajarán a La Plata para controlar en persona la apertura de las muestras, serán dos de los fiscales que integran el equipo y firman la causa, Laura Capra, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Benavídez, y el fiscal general adjunto de San Isidro, Cosme Iribarren.
Allí en La Plata, la sección patología trabajará sobre el corazón de Maradona, que fue extraído en forma completa y que, de acuerdo a los que observaron los médicos forenses que practicaron la autopsia, padecía de una “miocardiopatía dilatada” y pesaba más de 500 gramos, cerca del doble que uno normal.
Uno de los puntos que solicitaron los profesionales es analizar el “sistema de conducción” cardíaco, es decir, las estructuras desde donde se produce y se trasmite el estímulo eléctrico que permite la contracción del corazón.
También serán analizados en los estudios histopatológicos lo que se denomina el “pool de vísceras” (muestras de una serie de órganos para ver si hay enfermedades o lesiones) y las meninges, es decir, las membranas que recubren el cerebro.
En ese laboratorio, también mañana comenzarán a ser analizadas para los estudios toxicológicos las muestras de orina, sangre y los hisopados nasales que se tomaron en la autopsia.
El otro laboratorio que por decisión de los fiscales también trabajará a partir de mañana en el análisis de otras muestras para estudios toxicológicos será el del Cuerpo Médico Forense (CMF) que depende de la Corte Suprema Justicia de la Nación.
Allí, según las fuentes consultadas por Télam, se remitirá el mechón de pelo obtenido con bulbo para la pericia de “tóxicos de depósito”, el líquido ascítico que fue extraído del peritoneo (cavidad abdominal) y otro “pool de vísceras” pero con los tejidos adiposos.
Los voceros aclararon que mañana no se conocerá el resultado de ninguno de los estudios, ni siquiera de los que se realizarán sobre las muestras de orina y de sangre, que suelen ser los primeros en obtenerse.
Ayer, los médicos que hicieron la necropsia, que son el jefe del Cuerpo Médico de San Isidro, Federico Corasaniti; el jefe de la morgue de San Isidro, Agustín Grimoldi; el jefe del Cuerpo Médico de San Martín, Alejandro Vega; y el jefe del Cuerpo Médico de La Plata, Javier Grubiza, entregaron en la fiscalía el protocolo de autopsia.
Según las conclusiones de estos forenses, Maradona murió como consecuencia de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada” y descubrieron en su corazón una “miocardiopatía dilatada”.