Miles europeos en situación de vulnerabilidad que residen en el Reino Unido, incluidos ancianos, niños bajo cuidado y víctimas de abuso, corren el riesgo de perder su derecho a permanecer en el país tras el Brexit, debido a la dificultad para presentar los documentos necesarios para aplicar a la residencia.
Un informe del Observatorio de Migración de la Universidad de Oxford, al que accedió Télam, sostiene que hay muchos miles de personas vulnerables entre los más de tres millones de ciudadanos que residen en el Reino Unido que no pueden o no saben cómo llevar adelante el proceso de solicitud de residencia.
De acuerdo al estudio realizado por los expertos en migración, los niños bajo cuidado son particularmente los más vulnerables ya que pueden no tener apoyo para completar una solicitud y podrían tener dificultades para presentar pruebas de residencia si se han mudado con frecuencia entre hogares sustitutos y escuelas.
También es el caso de más de 50.000 mujeres víctimas de abuso doméstico o personas discapacitadas, casi 60.000 personas de más de 75 años y aquellos que no tienen acceso a Internet, así como alrededor de otras 250.000 que tienen dificultades con el idioma inglés.
El gobierno británico está desarrollando un sistema para dar a los ciudadanos de la Unión Europea (UE) que ya viven en el Reino Unido un «estatus establecido» a partir de la noche del 29 de marzo del año próximo, cuando se haga efectiva la salida del Reino Unido del bloque comunitario.
En febrero último, la ministra de Inmigración, Caroline Nokes, aseguró que el objetivo es que el esquema sea lo más sencillo posible, pero los académicos advierten que el gobierno enfrenta un desafío para crear conciencia sobre la necesidad de aplicar a la residencia.
Madeleine Sumption, directora del Observatorio de la Migración, explicó al diario The Guardian que el Ministerio del Interior está claramente interesado en crear un sistema que sea fácil de usar y la mayoría de los ciudadanos de la UE deberían poder completar a través de un proceso simplificado de solicitud.
«Pero para una minoría de personas, el proceso será más difícil. Muchos de ellos son los más vulnerables de la sociedad, ya sea porque están socialmente aislados, han sido víctimas de la explotación o se enfrentan a barreras personales como la salud mental o la pobreza», aclaró la experta.
Según lo anunciado por el Ejecutivo, las personas que hasta el 31 de diciembre de 2020 hayan estado continuamente «viviendo legalmente» en el Reino Unido durante cinco años, podrán postularse para permanecer indefinidamente mediante la adquisición de un estatuto de residente.
Aquellos que no hayan vivido durante cinco años cuando el Reino Unido deje la UE podrán solicitar quedarse hasta alcanzar ese umbral de cinco años para poder solicitar un estado establecido.