El presidente del BCRA admitió que "están preocupados" por la suba de precios y que el principal problema de la Argentina es que "no puede transformar su ahorro en inversión"
Mientras el Gobierno sigue utilizando viejas recetas para controlar los precios, el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, advirtió que «si el Ejecutivo no logra que las empresas de consumo masivo inviertan y aumenten la producción, «vamos a seguir teniendo inflación».
Consideró que «esas empresas deben responder a los tirones de la demanda agregada por los resultados de las paritarias y las políticas públicas, con más producción y no con más aumentos de precios», sostuvo el funcionario. En esa línea evaluó que «muchas de las empresas que producen productos de consumo masivo, que tienen un impacto en el mercado del 80%, en muchos de esos productos están trabajando al límite de capacidad instalada».
«Por eso, la gran apuesta es el crecimiento. Podemos tener las mejores paritarias, las mejores políticas sociales, pero si no conseguimos que aquellas empresas que tienen que producir bienes para satisfacer la demanda no inviertan y no aumenten la producción vamos a tener inflación y no crecimiento», añadió.
Con relación a una eventual dolarización de la economía para combatir la suba de precios, Pesce fue tajante: «Cuando alguien tiene en mente un fuerte ajuste, no lo plantea de esa manera. Ponen un símbolo que es la dolarización, pero no dicen que para eso hay que hacer un ajuste tremendo. Están planteando algo que suena como agradable para encubrir los pasos previos a una dolarización.
«Argentina no tiene crédito internacional y tiene 40% de pobreza. No estamos en condiciones de aplicar ajustes de esas características», añadió.
No obstante, reconoció que «estamos preocupados por la suba de precios. Argentina venía con una inflación exuberante en 2018 y 2019 impulsada por shock de ajuste en el tipo de cambio. Se logró moderar en 2020 y en 2021 tuvimos el primer shock de precios internacionales. Y ahora de nuevo», explicó.
«Si estuviéramos en una economía de 2% de desocupación y 4% de pobres y crédito internacional, la ecuación se resuelve fácilmente: puede abrir la economía, provocar una caída de la demanda agregada y modera la inflación«, consideró el jefe de la autoridad monetaria, en declaraciones a un canal de noticias.
Además, evaluó que la estabilidad cambiaria «es un punto fundamental para contener la inflación en un país con una economía bimonetaria. Es por eso, que la suba de tasas y el acuerdo con el FMI puede traer un poco de aire, siempre y cuando los precios internacionales no sigan presionando».
A su criterio, este año la inflación puede llegar a ser menor al 50%, «ya que así lo hemos plasmado en nuestro acuerdo con el FMI. No hacemos pronósticos, pero esperamos que sea menos». «Esperamos que la inflación cambie la tendencia y se desacelere. En ese juego es donde vamos a seguir midiendo si subir la tasa o mantenerla», resaltó.
Con respecto al cepo cambiario, Pesce dejó en claro que «Argentina no tiene un problema de ahorro. Tiene mucho ahorro. Pero tiene un problema que no puede transformar su ahorro en inversión. Cuando consigamos eso, va a ser un tema clave para superar el cepo».