La inmensa mayoría de los asesinatos en México son perpetrados por narcotraficantes, que en los primeros seis meses de 2018 mataron a más de 11.000 personas, 28% más que en el mismo periodo del año anterior, denunció este martes la ONG Semáforo Delictivo.
«El año pasado fue muy malo y este año es peor», dijo en conferencia de prensa Santiago Roel, fundador de la organización Semáforo Delictivo, que realiza estudios de seguridad pública cotejando cifras gubernamentales con encuestas en línea y datos de consultoras.
De enero a junio de este año se registraron 15.973 homicidios dolosos en México, según cifras de la secretaría de Gobernación (Interior), que no precisa sin embargo cuántos casos tienen que ver con el crimen organizado.
«Todo este baño de sangre, todo este tipo de homicidio tienen que ver con drogas (…) Pleitos entre mafias de droga» que se disputan el territorio, y no con otro tipo de crimen organizado como las bandas que roban combustible, secuestran, extorsionan o trafican personas, aseguró Roel.
Según los estudios de Semáforo Delictivo, existen 11.241 casos de «ejecuciones» por sicarios narcotraficantes entre las 13.738 investigaciones por homicidio que se iniciaron en el primer semestre de 2018.
Esto representa un incremento de 28% respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se registraron 8.791 casos de ejecuciones, precisó Roel, al subrayar que se trata de «un récord histórico».
Guanajuato, un céntrico estado que solía ser tranquilo al albergar buena parte del sector manufacturero mexicano orientado a la exportación y tener destinos favoritos de turistas extranjeros como San Miguel Allende, se convirtió en la región con más asesinatos por narcotraficantes, con 1.241 casos entre enero y junio, según Semáforo Delictivo.
Le siguen la turística Baja California (noroeste), Guerrero (sur), Michoacán (oeste) y Veracruz (este).
Cárteles como Jalisco Nueva Generación, Sinaloa y Los Zetas operan en Guanajuato, donde recientemente numerosos policías han sido asesinados.
«Es evidente que están compitiendo ahí los grupos (narcotraficantes) y es evidente que el grupo que está defendiendo o queriendo atacar está involucrando a las autoridades en el narcomenudeo», dijo Roel.
Según la ONG, en el primer semestre del año aumentaron los casos de homicidio (15%) y femicidio (11%), mientras el secuestro disminuyó (18%).
Desde finales de 2006, cuando el gobierno lanzó una polémica ofensiva militar contra el narcotráfico, más de 200.000 personas han sido asesinadas en México, según cifras oficiales.