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Merkel: es «muy triste» que Alemania haya superado los 100.000 muertos por coronavirus


"Lamentablemente, en este momento, se están sumando más de 300 muertes cada día", expresó la jefa de Gobierno

La jefa de Gobierno Angela Merkel dijo que este jueves era un «día muy triste» para Alemania y pidió restricciones, luego de que el país europeo superara los 100.00 muertos por coronavirus en medio de un avance récord de la enfermedad.

El organismo de epidemiología alemán informó 351 decesos por coronavirus en la última jornada, lo que elevó el total a 110.119 y convirtió a Alemania en el quinto país de Europa en superar esa marca después del Reino Unido, Francia, Rusia e Italia. El Instituto Robert Koch (RKI), notificó además otras 75.961 infecciones, un nuevo récord diario para la primera economía de la zona euro, superando al de ayer de casi 67.000.

«Por supuesto que es un día muy triste, que tengamos que llorar a 100.000 víctimas del coronavirus. Y, lamentablemente, en este momento, se están sumando más de 300 muertes cada día», dijo Merkel en conferencia de prensa en Berlín.

La líder alemana, que ejerció el poder 16 años y está en funciones hasta que asuma su sucesor, el mes que viene, dijo que ya se vislumbraban cientos de muertes más por Covid-19, a casi dos años del primer caso detectado en Alemania. Las muertes «se corresponden muy claramente con el número de infecciones que están teniendo lugar. Sabemos qué porcentaje promedio de personas no sobrevivirán a esta enfermedad, agregó, con rostro sombrío.

El RKI dijo que la incidencia también alcanza un nuevo récord con 419,7 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días, informó la agencia de noticias AFP. «La situación es tan seria porque aún estamos en un crecimiento exponencial y porque los casos que vemos hoy son básicamente los pacientes que estarán en terapia intensiva en 10 a 14 días», agregó Merkel.

La pandemia emerge como el principal desafío para la nueva coalición gubernamental que debe tomar las riendas en diciembre tras un acuerdo anunciado ayer entre socialdemócratas, Verdes y liberales. «La situación es grave», admitió el líder socialdemócrata Olaf Scholz, que debe convertirse en el futuro jefe de Gobierno de Alemania y relevar a Merkel.

El brote se extiende por todo el continente, actualmente la región del mundo más castigada por la pandemia con más de 2,5 millones de casos y casi 30.000 fallecidos en una semana. Y la situación empeora, especialmente en los países con tasas de vacunación más bajas como es el caso de Alemania o su vecina Austria, donde el Gobierno reintrodujo el confinamiento de la población.

Aunque el número de casos diarios en Alemania es mayor que en la ola del pasado invierno de 2020-2021, hay menos muertes diarias en relación a los contagios, y los expertos atribuyen esto a las vacunas, que reducen el riesgo de casos graves.

De todos modos, los hospitales en ciertas regiones ya enfrentan «una sobrecarga aguda» que hace necesario el traslado de pacientes, advirtió esta semana Gernot Marx, presidente de la federación alemana de médicos de cuidados intensivos.

En el caso alemán, el porcentaje de población completamente vacunada se sitúa alrededor del 69%, por debajo de otros grandes países europeos como España, Francia o Italia.

«Cada día cuenta», advirtió Merkel, que dijo que pidió más firmeza a Scholz, que es de un partido distinto pero fue su ministro de Finanzas desde 2018.

Por ahora, la futura coalición de Gobierno descarta la idea de un confinamiento nacional y apuesta por la generalización de un certificado sanitario en los transportes y restricciones de acceso para los no vacunados a ciertos lugares.

Scholz indicó también que Alemania tenía que «estudiar» una eventual «extensión» de la obligación de vacunarse, actualmente en vigor en el ejército y en los establecimientos sanitarios y de cuidados. Asimismo, se comprometió a desbloquear 1.000 millones de euros (1.120 millones de dólares) para el personal sanitario.

El Gobierno saliente de Merkel, en coalición con los socialdemócratas, prolongó el miércoles hasta abril de 2022 las ayudas acordadas a las empresas afectadas por los cierres y las caídas de ingresos por la pandemia.

La oficina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Europa advirtió esta semana que la Covid-19 podía provocar 700.000 muertes más en el continente hasta el final del invierno en el hemisferio norte, en marzo.

La institución atribuye esta ola europea a la combinación de la prevalencia de la variante Delta, de una cobertura insuficiente de las vacunas y de la relajación de las restricciones.

En la Unión Europea (UE), un 67,7% de la población ha recibido al menos dos dosis de la vacuna, aunque las diferencias son notorias. Según cifras del martes, solo 24,2% de los búlgaros están inmunizados, contra 86,7% de los portugueses.

Europa debe tomar «urgentemente» medidas para intentar frenar esta ola, advirtió el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), agencia sanitaria de la UE encargada de las epidemias.

Varios países ya han endurecido sus restricciones, aunque ello ha provocado recientemente protestas en países como Austria, Bélgica o Países Bajos, a veces violentas.