La agrupación Memoria Activa solicitó hoy que el ex juez Juan José Galeano y el ex presidente Carlos Menem sean condenados a 20 y 6 años de prisión, respectivamente, en la causa por el encubrimiento del atentado a la AMIA.
El pedido de penas fue formulado por el abogado Rodrigo Borda en el marco del juicio oral por el encubrimiento al ataque terrorista ocurrido en 1994 que ya lleva más de dos años y se desarrolla en los tribunales federales de Comodoro Py, en el barrio porteño de retiro.
A diferencia de lo que había ocurrido con los alegatos de la Unidad de Fiscal Investigación (UFI) del atentado a la AMIA y de la Unidad AMIA del Ministerio de Justicia, Memoria Activa pidió penas para todos los acusados de desviar la investigación.
«Todos los imputados por encubrir contribuyeron a la impunidad y lo hicieron de una manera que será muy difícil de reparar o revertir. Esto no puede dejar de considerarse», remarcó el abogado antes de iniciar con los pedidos de pena.
Entre los acusados del encubrimiento también se encuentran los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, el ex titular de la DAIA Ruben Beraja, el ex titular de la SIDE Hugo Anzorreguy y el ex comisario Jorge «Fino» Palacios, además de otros policías y agentes de inteligencia y el ex reducidor de autos Carlos Telledín.
Durante todo el alegato, Borda detalló los elementos de prueba con los que expuso la supuesta participación de cada acusado en los dos hechos que se juzgaron: el pago ilegal a Telleldín con fondos reservados de la SIDE para mienta y acuse a falsos culpables y el abandono deliberado de la llamada “pista siria”, que apuntaba al sospechoso Alberto Kanoore Edul, amigo de la familia Menem.
«No fue un encubrimiento cualquiera, no fue un peculado cualquiera. Estos hechos lastimaron a la sociedad toda y habla de la responsabilidad del Estado para garantizar verdad y justicia», sostuvo Borda en su alegato.
«Todos los hechos (ventilados en el juicio) contribuyeron a consagrar la impunidad y desprestigiar enormemente a las instituciones fundamentales de nuestra república como la justicia, las fuerzas de seguridad y los servicios de inteligencia», sostuvo.
Antes de avanzar sobre los pedidos de pena (el máximo previsto en casi todos los casos), remarcó: «El mensaje que transmita la pena en este caso debe ser muy claro y elocuente para reparar esa conducta que se le reprocha a los acusados».
Finalmente, Borda , en representación de Memoria Activa, pidió 20 años de prisión e inhabilitación perpetua para Galeano, 13 años para Mullen y Barbaccia, 6 para Menem, 10 para Anzorreguy, 5 para Palacios, 4 para Telleldín y 4 años y 8 meses para Beraja.
Para los ex agentes de inteligencia Patricio Finnen y Juan Carlos Anchezar, Borda pidió 5 y 6 años de prisión respectivamente mientras que para el ex comisario Carlos Castañeda pidió 5 años.
Además pidió 3 años y 6 meses de prisión para Víctor Stinfale, el abogado de Telleldín al momento de cobrar el soborno, y 3 años para Ana María Boragni, ex pareja de Telleldín, que recibió el dinero.
Hacia el final del alegato, el abogado de Memoria Activa hizo referencia a la decisión del gobierno nacional de no pedir penas para los ex fiscales Mullen y Barbaccia a pesar de que los abogados de la unidad sostuvieron que había que hacerlo.
«Estamos particularmente interesados en que se investigue hasta las ultimas consecuencias hasta dónde llegaron estas presiones del Ministerio de Justicia frente a un juicio donde se esta analizando el encubrimiento del atentado a la AMIA», sostuvo Borda.
El abogado reclamó que el tema, que ya fue denunciado incluso por el ex titular de la Unidad AMIA del Ministerio de Justicia, el radical Mario Cimadevilla, sea investigado de inmediato y que no que haya que esperar a que se investigue «cuando cambie el gobierno».