Con una movilización al Cemar, estudiantes de Medicina y residentes en efectores locales pidieron "condiciones dignas" para poder completar su formación y finalizar con la precarización laboral
Médicos residentes de clínica médica de los efectores públicos de la Municipalidad de Rosario se movilizaron cerca del mediodía a la puerta del Cemar (Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario) en reclamos de condiciones dignas de capacitación y trabajo. Denuncian que en plena pandemia se vio resentida su formación en clínica y que son tratados como trabajadores a pesar de no tener una remuneración.
Los estudiantes de Medicina que se nuclearon en la esquina de Moreno y San Luis llegaron del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, el Roque Saenz Peña, el Gabriel Carrasco y el Juan Bautista Alberdi.
«Hace años que los residentes no cobramos ningún sueldo y trabajamos de lunes a lunes durante 3 años para poder formarnos», denunció Ruth Cimadom en diálogo con CLG.
Ella es residente de 1re año de Clínica Médica en el Juan Bautista Alberdi y remarcó que es «muy difícil» hacer esta tarea «sin remuneración»: «Tenes que trabajar en otro lugar las pocas horas de la semana que te quedan para tener algo», sentenció.
Desde el seno de la manifestación expusieron que hacen «dos o tres» guardias de 12 horas por semana, pero algunos llegan a cumplir las 24 y otros hasta 36, como parte de su formación. «De igual forma vamos todos los días al hospital y hacemos casi 12 horas por la pandemia», agregó Ruth.
El reclamo se extendió en los últimos años, pero sin respuesta de las autoridades. Es por ello que se llegó a este paro de residentes municipales con movilización y adelantaron que de persistir esta problemática continuaran los cortes de crédito laboral.
Marina Levanto, otra residente del Juan Bautista Alberdi, añadió que la formación que se busca dar «no se puede llevar a cabo en este contexto, por eso exigimos una adecuada para nuestra especialidad».
«Estamos a la merced, trabajando arduamente y orgullosos de ayudar a la población, sin embargo también tenemos nuestros derechos a tener condiciones dignas para vivir y trabajar», apuntó la mujer desde la puerta del Cemar.
En este contexto, la residente contó que en el Hospital Carrasco desde hace más de un año «sólo atiende pacientes Covid y formar clínicos en este contexto es particular, entendemos las necesidades, pero es justo formarse en el resto de las patologías».