Alrededor del 70% de los estudiantes argentinos solo puede resolver problemas matemáticos simples y menos del 5 por ciento logra hacerlo en un nivel avanzado.
Así lo reveló el informe elaborado por el Observatorio Argentinos por la Educación, «Radiografía de los aprendizajes de Matemática en Argentina», que destacó que la Ciudad de Buenos Aires es la jurisdicción con mejores resultados del país, aunque advirtió que sus alumnos aprenden poco en comparación con los de otros países.
Solo el 4,2% de los estudiantes argentinos logra un nivel avanzado en Matemática, lo que supone resolver problemas complejos e inferir datos no explícitos.
Los resultados de la prueba Aprender 2017 del último año de secundaria muestran que el 70% de los estudiantes solo puede resolver problemas simples que exigen realizar procedimientos rutinarios a partir de datos dados.
La prueba PISA 2012, por su parte, indica que el 90% de los alumnos argentinos de 15 años tuvieron dificultades para manejar fracciones, porcentajes y decimales.
La cuestión adquiere actualidad frente a la decisión del Ministerio de Educación de la Nación de aplicar una reforma de la enseñanza de Matemática en las escuelas, siguiendo el modelo de Singapur, a partir de 2019.
Las evaluaciones aportan un diagnóstico que resulta el punto de partida fundamental para cualquier proyecto de reforma.
La Argentina no tiene estudiantes que alcancen los niveles más altos de aprendizaje, según los resultados de PISA 2012.
Al observar los desempeños por nivel socioeconómico, surge que los alumnos más privilegiados de Argentina tienen peores resultados que los desaventajados de España.
«Estos resultados plantean un llamado de atención acerca de cómo fortalecer lo que está pasando en todas las aulas del país, y especialmente en las escuelas de contextos de mayor pobreza. Las investigaciones revelan que en las clases de Matemática los alumnos dedican el tiempo a hacer cuentas y resolver ejercicios de manera mecánica, sin comprender el sentido ni la relevancia de lo que están trabajando», planteó Melina Furman, doctora en Enseñanza de las Ciencias y profesora de la Universidad de San Andrés.
En primaria, los desempeños son mejores: en Aprender 2016, el 58,6% de los estudiantes de 6° grado se ubican en los niveles satisfactorio o avanzado.
Algunos expertos ponen el foco en las características de cada nivel para explicar esta diferencia.
«El problema del aprendizaje de la Matemática en la escuela no está necesariamente vinculado con la didáctica que utilizamos para su enseñanza, sino quizás en la ruptura del modelo que se produce entre la primaria y la secundaria», señaló Gustavo Zorzoli, profesor de Matemática y rector del Colegio Nacional de Buenos Aires.
Zorzoli comentó que «los datos deben servirnos a quienes enseñamos Matemática para revisar cómo lo estamos haciendo, y a las autoridades educativas para definir de forma consulta y consensuada aquello que haya que modificar».
Por su parte, Furman advierte sobre «la necesidad imperiosa de acompañar el trabajo de los profesores con capacitaciones, buenos recursos y mejores condiciones de modo que puedan implementar una enseñanza anclada en problemas reales que no se resuelvan simplemente aplicando fórmulas y algoritmos, sino que posicionen a los alumnos en un rol intelectualmente activo».
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Ciudad de Buenos Aires, la mejor del país pero lejos de los estándares mundiales.
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Los datos del informe indican que los desempeños en Matemática son muy dispares entre las provincias.
En Aprender 2017, Ciudad de Buenos Aires (53,3%) y Córdoba (42,3%) son las dos jurisdicciones con mayor porcentaje de estudiantes del último año de secundaria en niveles satisfactorio o avanzado.
Estos resultados son entre 3 y 4 veces más altos que los de provincias como Chaco (15%) y Formosa (12%), ubicadas en el otro extremo.
Si bien los resultados del ámbito porteño son los mejores del país, la comparación internacional arroja que los aprendizajes también son bajos en la Ciudad.
Según los datos de PISA 2015, apenas el 4% de los estudiantes porteños de 15 años se ubica en los niveles 5 y 6, los más altos de la evaluación.
Las pruebas TIMSS 2015 de 4° grado y 1er año arrojan un panorama aún más crítico: allí Ciudad de Buenos Aires no tiene estudiantes con nivel avanzado.