El secretario general de Luz y Fuerza Rosario habló con CLG sobre la última inauguración de las seccionales y mostró satisfacción por completar el proyecto que comenzó en 2015
Con la promesa intacta del 2015, Luz y Fuerza de Rosario cerró un ciclo de renovación de sus seccionales en la región con la inauguración de la nueva casa para San Lorenzo. En un acto muy emotivo con 300 personas invitadas, los afiliados sanlorencinos tuvieron su noche entre celebración y el placer de trabajo cumplido. CLG habló con Alberto Botto, secretario general del gremio rosarino, que contó las sensaciones de este estreno: «Es una doble satisfacción porque es una construcción que iniciamos en pandemia de un predio que adquirimos con anterioridad y recursos propios del gremio. Pudimos darle las comodidades que necesitan los compañeros».
En segundo lugar, está la alegría de completar una etapa de puesta en valor para las seccionales del interior de Luz y Fuerza Rosario: «Cuando asumimos en 2015 nos comprometimos con todos los compañeros de las diferentes seccionales a que íbamos a mejorar las condiciones edilicias para lograr algo práctico y útil para las actividades gremiales y por qué no también que le sirva como uso a la familia de los compañeros que se desempeñan en la seccional y este año justamente con San Lorenzo, que era la última, hemos cumplido con nuestra palabra».
En anterioridad, Luz y Fuerza Rosario había mejorado las seccionales de Villa Constitución, Casilda, Firmat y Carcarañá y ahora con San Lorenzo completa la saga. «Fue una noche llena de emociones,»Nacho» Perez, secretario de la seccional San Lorenzo, estaba muy emocionado por todo lo que se vivió esa noche. Realmente juntó a toda la familia de Luz y Fuerza de San Lorenzo y de todas las seccionales», dijo el sindicalista rosarino.
Botto reveló que la apertura de San Lorenzo contó con el apoyo de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza, quienes por primera vez estuvieron presentes de la mano de Guillermo Moser, secretario general, y el rosarino Juan Alfredo Romero, sub secretario general, y agregó que al momento de cortar la cinta «las sensaciones fueron inmejorables»: «Todos estaban muy conformes y hasta creo que no pensaban encontrarse con una obra semejante».
El gremialista detalló que la antigua seccional estaba alejada del centro de San Lorenzo y «no tenía todas las comodidades que posee la nueva».
«Ahora es mucho más amplia, tiene oficinas para la obra social y el secretario, además de un Salón de Usos Múltiples (SUM) de 380 m2 que da la posibilidad de realizar eventos masivos como asambleas», añadió.
Botto auguró un 2022 con muchas más obras en pos de los afiliados con una inversión en el campo de recreo de Luz y Fuerza e iniciar el proyecto para desarrollar en la localidad de Lucio V. López, lugar donde funcionaba la vieja Usina. Además, está en carpeta una puesta en valor de la casa adquirida en Villa Gobernador Gálvez donde funciona una oficina de la Obra Social de Luz y Fuerza.
En otro orden, adelantó que el próximo año se verá una «actualización de la sede central», ubicada en Calle Paraguay 1135.
Metiéndose en la temporada de verano, afirmó que siguen las construcciones en Uspallata, Mendoza, donde el sindicato inauguró en octubre un complejo de cuatro cabañas, pero con intención de ampliarlo a doce. Asimismo Botto, apuntó a continuar mejorando los complejos vacacionales de Villa Gesell (Buenos Aires) y Cosquín (Córdoba). «Tenemos varios desafíos por delante», concluyó el secretario general.