Espectáculos

Luisana Lopilato: «Las plataformas permiten que se pueda ver nuestro cine por todo el mundo»


La actriz será protagonista de "Pipa", que estrena a nivel global el próximo miércoles a través de Netflix

(Por Solange Levinton-Télam)

La actriz Luisana Lopilato, protagonista de «Pipa», el filme que cierra la trilogía policial dirigida por Alejandro Montiel que comenzó en 2018 y se estrenará a nivel global el próximo miércoles a través de Netflix, destacó que «las plataformas dieron la posibilidad de que se pueda ver nuestro cine por todo el mundo».

«Argentina tiene una producción increíble, directores y autores que no tienen nada que envidiarle a ningún otro país, y las plataformas dieron la posibilidad de que eso se pueda ver en todo el mundo», destacó Lopilato a Télam respecto del estreno global de la última parte de la trilogía basada en Manuela «Pipa» Pelari, un famoso personaje de las novelas de Florencia Etcheves.

«Yo estoy en Inglaterra -agregó- y el otro día por la calle me encontré con israelíes que sabían del estreno de `Pipa´ y antes eso no pasaba. Por eso hoy es lo mismo hacer una película en Hollywood o Australia porque entrás en la casa de todo el mundo».

Primero fue «Perdida», estrenada en salas de cine en 2018, donde Pipa se enfrentaba a la desaparición de su mejor amiga Cornelia Villalba durante el viaje de egresado en el sur argentino y 14 años después, cuando decide especializarse en casos de secuestro y trata de personas, intentará resolver el caso.

Pero, antes, en 2020 Netflix estrenó «La corazonada», una precuela donde se ve a Manuela dando sus primeros pasos como investigadora junto a Francisco Juanez (Joaquín Furriel), con quien deberán resolver el violento asesinato de una chica de 19 años cuya principal sospechosa es la mejor amiga de la víctima.

Finalmente, en «Pipa», escrita por Mili Roque Pitt, Montiel y Etcheves, la protagonista vive aislada y alejada de su pasado en el norte argentino luego de abandonar su trabajo como investigadora, hasta que la aparición de un cadáver la lleva a los lugares de los que creía haber escapado.

«Dentro de la trilogía, esta es una película totalmente diferente a las otras porque es un western y, además, muestra a Pipa totalmente diferente, en otro momento de su vida, fuera de la fuerza y como madre», adelantó Montiel, quien dirigió filmes como «8 semanas», «Extraños en la noche» y «Un paraíso para los malditos».

Luisana, ¿Con qué Pipa se va a encontrar el público en este cierre de trilogía?

Luisana Lopilato: Se van a encontrar con una Pipa más madura, que quiere dejar su historia trabajando en crímenes violentos después de haber visto tanta injusticia, tanta corrupción y de las cosas que fueron pasando en las primeras dos películas. Quiso cambiar de vida y se alejó de la ciudad, tiene un hijo, se dedicó a otra cosa hasta que hay un crimen en La Quebrada y su tía le pide ayuda sabiendo que ella tiene mucha experiencia y es la única que la puede ayudar.

¿Cómo fue la experiencia de interpretar y componer un mismo personaje a través del tiempo?

LL: Mili y Alejandro tenían muy presente el tono que querían que tuviera Pipa, me marcaron mucho cómo querían que fuera, que hablara, que caminara y un poco me la terminé creyendo. Me cuesta dejarla, me encariñé mucho con el personaje y me encantaría que vuelva.

¿Cuál fue la mayor dificultad de pensar en una saga policial en un país que no tiene tanta tradición de ese tipo de películas?

Alejandro Montiel: Acá estamos en un western pero seguimos con el mismo tipo de trama policial. Si bien en Argentina no hay tradición de ennoblecer o enaltecer a un policía, nos basamos a rajatabla en el género y el tipo de personaje heroico siempre está. En el mundo tuvo éxito la película, estuvo en los primeros puestos en las primeras semanas en Suiza, Francia, Estados Unidos, Brasil, lugares bien disímiles, y creo que fue bien aceptada porque hay una historia. Yo siempre hice un cine así, antes de «Pipa» también, más universal y no localista. El western no es algo que se desarrolle mucho acá, que tenga una historia en Argentina, pero hoy las plataformas nos permiten hacer un tipo de cine más universal con más medios de producción, que antes era más difícil. Hoy hacer cine mainstream es mucho más posible y el espectador está esperando eso.

A la vez, en esta historia hay rasgos locales muy reconocibles como la impunidad de «los hijos del poder», la lucha de los pueblos originarios por el territorio….

AM: Sí, me interesaba trabajar las problemáticas actuales que no llegan al cine y trabajarlos dentro del policial.

 La primera tuvo un estreno en sala y las otras dos en plataforma, ¿Creen que este tipo de películas ya no tienen espacio en los cines tradicionales?

AM: La producción de cine nacional siempre fue difícil. Las últimas dos películas que hice fueron para plataformas, no hice más para cine, pero creo que se produce menos. Hoy, si querés hacer una película, tenés que pensar en el mundo y en el espectador de acá, de Colombia, de Estados Unidos y Polonia, trabajando para que lo local sea comprendido en otros países.

¿Ese objetivo modifica el modo de componer y pensar el personaje?

LL: No y siento que Argentina tiene una producción increíble, hace un cine, hay directores y autores increíbles, no tenemos nada que envidiarle a ningún otro país, y las plataformas dieron la posibilidad de que se pueda ver nuestro cine por todo el mundo. Yo estoy en Inglaterra y el otro día caminando por la calle me encontré con gente de Israel que me comentó que se estrenaba «Pipa» el 27 de julio. Antes no pasaba eso. Esto de las plataformas dio un abanico de trabajo a todo el mundo y hoy es lo mismo hacer una película en Hollywood o Australia porque entrás en la casa de todo el mundo.