Ante el aumento de precios, muchas personas han tenido que ir cambiando sus hábitos o ajustándolos a los nuevos costos para poder seguir. CLG salió a la calle para conocer la situación de los rosarinos.
La situación económica del país afecta cada vez más a los ciudadanos. Ante la alta inflación, muchas personas han tenido que ir cambiando sus hábitos o ajustándolos a los nuevos costos para poder seguir. Por eso, CLG salió a la calle para hablar con los rosarinos y conocer su situación.
La mayoría de los consultados coincide en que han tenido que recortar, algunos en necesidades básicas y otros en cosas un poco más prescindibles. Pero en fin, prácticamente nadie quedó exento.
«En líneas generales en lo que es comida para poder llegar con la tranquilidad de lo que son los impuestos. Recortando en necesidades básicas», aseguró una de las mujeres entrevistadas. En la misma línea, un joven destacó: «Empezamos a consumir menos carne y a buscar otras alternativas. También vimos un recorte en la salud pública porque tuvimos que comprar medicamentos que antes eran gratuitos».
A su vez, un taxista coincidió en la necesidad de cambiar ciertas costumbres respecto a la alimentación, como pasar «de las primeras marcas a las segundas». Pero, además, contó que también le tocó encontrar una manera para ahorrar en el trabajo en sí. «Tenemos que recortar en combustible, por eso se ven tantos autos en las paradas», destacó.
Seleccionar marcas, buscar precios, cancelar vacaciones y evitar salidas costosas se han vuelto un eje fundamental en la economía de los rosarinos. Ante la crisis, los ciudadanos buscan la manera de seguir adelante.