El DNU que prohíbe desalojos y descongela los alquileres termina el 1º de abril y los inquilinos ya adelantan una jornada "muy triste"
Los inquilinos de Rosario y de distintos puntos del país realizaron este jueves movilizaciones para reclamar ante el inminente fin del Decreto 320/20, que prohíbe desalojos y congela los precios de los alquileres a marzo de 2020. El gobierno decidió darle fin a esta iniciativa a partir del 1º de abril, lo que alertó a los locatarios.
En Rosario la concentración se dio en la Plaza Pringles (Paraguay y Córdoba). Allí, un grupo de inquilinos llevaron carteles y pancartas a pesar de las bajas temperaturas y el cielo cubierto de nubes. «¡Extensión del DNU 320 ya!», «No quiero trabajar sólo para pagar el alquiler» y «Ferraresi hacete cargo», se podía leer entre los asistentes. Este último en clara alusión al ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación.
Mientras se daba la protesta, CLG habló con Emmanuel Canelli, representante de la Asociación de Inquilinos de Rosario, que describió la situación «muy difícil y desesperante» que transitan quienes tendrán que afrontar deudas y citaciones a la Justicia a partir de abril.
«Lamentablemente hay familias que van a quedar en la calle si no se cambia esta situación», afirmó Canelli, quien además alertó que existen grandes endeudamientos por parte de los inquilinos en los alquileres, las expensas y los servicios.
El representante de los Inquilinos indicó que «es necesaria una revisión y ver qué plan hay para salir de este esquema. Del cual hay que salir, pero para hacerlo hay que garantizar algunas cuestiones«.
Entre los puntos que marcó Canelli se encuentran la Ley de Alquileres (aprobada por el Congreso en junio del 2020) y el Alquiler Social (establecido dentro de dicha ley). El programa nacional de Alquiler Social tiene la misión de facilitar el acceso al alquiler a personas en situación de violencia de género, jubilados, pensionados, titulaciones de prestación por desempleo y todas aquellas personas que se hallen en una situación de vulnerabilidad.
En este sentido volvió a repetir lo importante de replantear el fin del DNU no sólo para extenderlo sino para «un plan de desendeudamiento y para controlar los abusos a la hora de alquilar y el no cumplimiento de la ley de alquileres».
El 1º de abril se termina el DNU que prohíbe los desalojos y Canelli adelantó una jornada «muy triste y desesperante donde se pueden dar muchísimos desalojos».
Sobre Jorge Ferraresi, ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, fue claro: «No atiende a ninguna asociación de inquilinos».
«El gobierno nacional se ha preocupado por el sector en otros momentos, pero creemos que hoy por hoy no están dadas las condiciones económicas ni sanitarias para llevar a cabo esta decisión», enfatizó Canelli y cerró: «Con estos desalojos se puede adelantar la segunda ola».