A diferencia de lo que pasaba en Dolores, en Melchor Romero los imputados tendrán la posibilidad de salir diariamente a un patio de la Alcaidía, pero no tendrán contacto con otros presos.
Los ocho detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa el 18 de enero pasado en la localidad balnearia de Villa Gesell, fueron trasladados este viernes a una alcaidía en Melchor Romero, cerca de La Plata, donde serán sometidos a peritajes psicológicos y psiquiátricos en la Asesoría Pericial de la capital bonaerense, informaron fuentes vinculadas a la causa.
Los jóvenes quedarán encerrados en el Pabellón 6 de la Alcaidía La Plata 3, en Melchor Romero, donde antes funcionaba la Unidad Penitenciaria 29 de alta seguridad y que ahora fue reformulada para recibir presos que se alojarán de manera transitoria.
Se trata de las mismas celdas donde tiempo atrás estuvieron alojados en algún momento el cantante de cumbia Rubén Darío «El Pepo» Castiñeira o Carlitos Nair Menem.
Según las fuentes judiciales, los rugbiers fueron trasladados por decisión de las autoridades de la Dirección de Asistencia y Tratamiento del SPB, ya que entre el 13 y el 25 de abril próximos serán sometidos a peritajes psicológicos y psiquiátricos en la Asesoría Pericial de La Plata, y por cercanía decidieron que estuvieran en ese penal.
Las autoridades penitenciarias informaron de la decisión de trasladar a los presos fue notificada al juez de Garantías de Dolores, David Mancinelli, y hoy mismo se efectivizó el viaje.
Por eso, esta madrugada, Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (19), Blas Cinalli (18), Enzo Comelli (19), Ayrton Viollaz (20), Luciano Pertossi (18), Matías Benicelli (20) y Lucas Pertossi (20) fueron despertados muy temprano y llevados en un camión de traslados desde la Penitenciaria 6 de la ciudad de Dolores, situada en Riobamba 251, donde permanecían encerrados por el homicidio de Báez Sosa.
Según fuentes de la investigación, los rugbiers ya no estarán en una misma celda todos juntos, sino que serán separados en cuatro celdas de dos personas cada una, todas ellas ubicadas en un sector especial del pabellón 6.
A diferencia de lo que pasaba en Dolores, en Melchor Romero los imputados tendrán la posibilidad de salir diariamente a un patio de la Alcaidía pero no tendrán contacto con otros presos.
Además, estarán monitoreados las 24 horas y aún resta definir cuáles serán los días y horarios de visita que tendrán sus familiares, explicaron a Télam las fuentes consultadas.
Lo llamativo del traslado es la anticipación, ya que los encuentros con los psicólogos y psiquiatras recién están previstos desde el 13 del mes que viene, y más aún cuando el próximo jueves está prevista una audiencia ante la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores para definir si se confirman o modifican las prisiones preventivas de los ocho rugbiers.
Una fuente judicial aseguró a Télam que el servicio penitenciario ya tiene previsto llevar nuevamente a los detenidos el jueves a Dolores para que concurran a esa audiencia y, luego, volverán a traerlos a Melchor Romero.
La decisión penitenciaria causó sorpresa también a los propios imputados y a sus familiares, quienes se enteraron hoy mismo del traslado, pero aún no realizaron ninguna presentación judicial para expresar su queja.
Los ocho rugbiers oriundos de la ciudad de Zárate se encuentran con prisión preventiva como coautores del «homicidio doblemente calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas» de Fernando y por las «lesiones» que sufrieron sus amigos.
En tanto, como «partícipes necesarios» de esos delitos están acusados aunque en libertad Juan Pedro Guarino (19) y Alejo Milanesi (19).
La defensa de los diez rugbiers, a cargo del abogado Hugo Tomei, apeló las prisiones preventivas requeridas por la fiscal del caso, Verónica Zamboni, y avaladas por el juez, quien fijó para el 19 de este mes la audiencia oral clave luego de la cual se definirá si se confirman o modifican esas medidas.
El crimen de Fernando se produjo cerca de las 4.40 de la madrugada del sábado 18 de enero frente al boliche Le Brique, en pleno centro de Villa Gesell, cuando el joven fue atacado a patadas y trompadas por un varias personas.
El ataque quedó filmado por cámaras de seguridad y teléfonos celulares, por lo que horas después fueron detenidos como autores del crimen diez rugbiers que se hallaban de vacaciones y se alojaban en una casa cercana al boliche.