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Los comercios de la Terminal, en crisis: sin clientes, aguardan la vuelta de los ómnibus


Foto: Fernando Der Meguerditchian

CLG dialogó con comerciantes del lugar, quienes relataron la angustiante espera por la habilitación de los colectivos de larga distancia

Los comerciantes de la Terminal de Ómnibus de Rosario están atravesando un presente desesperante debido a la ausencia de clientes. Al no estar habilitado el transporte de larga distancia, el movimiento es prácticamente nulo y en los negocios las deudas se acumulan.

Foto: Fernando Der Meguerditchian

En este contexto, CLG se dirigió a la Terminal y dialogó con distintos comerciantes del lugar, quienes relataron la angustiante espera por la habilitación de los colectivos de larga distancia: «Venimos trabajando muy mal. No hay nadie. Al no entrar los colectivos no hay movimiento. La Terminal es una muerte, desde marzo estamos así», expresó el dueño de un bar.

Foto: Fernando Der Meguerditchian

«La Terminal estuvo cerrada y hará cinco meses que volvió a abrir, pero al no haber transporte el movimiento es nulo. Nos estamos organizando para reclamar que se reactive el transporte. La gobernación tiene que destrabar el transporte, al menos el interprovincial, porque el tema de larga distancia está muy duro», agregó.

Foto: Fernando Der Meguerditchian

Por otro lado, la dueña de un kiosco se expresó en la misma sintonía: «Se viene trabajando muy mal. Estamos a trabajando a un 15% o menos. La gente no entra y sin colectivos no tenemos trabajo. Nosotros trabajamos con el pasajero del día a día y desde el 20 de marzo no hay ningún movimiento».

Foto: Fernando Der Meguerditchian

«Estamos muy mal. Esto es muy deprimente, no sabemos que va a pasar. Desde septiembre que venimos con que van a empezar los interurbanos. De septiembre pasó a octubre, luego a noviembre y ahora dicen que en diciembre van a arrancar», relató.

Foto: Fernando Der Meguerditchian

Otro dueño de un bar sostuvo: «Desde mayo abrió la Terminal, pero sólo para trabajadores esenciales. Esto es un desierto. Dependemos en un 90% del transporte y el turismo. No estamos encuadrados dentro de turismo, lo que sería muy importante para nosotros para hacer planteos ante las autoridades. Tenemos empleados, deudas que se van acumulando y en vistas no hay nada que se pueda reactivar inmediatamente».

«Lo único que hemos recibido fue un subsidio de $50.000 de la provincia en todos estos ocho meses», añadió su socio.

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