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#Japon2019

Los All Blacks debutaron con un importante triunfo ante Sudáfrica


 

Los All Blacks neozelandeses, grandes favoritos al título, debutaron en el Mundial de Japón con un sufrido triunfo por 23-13 ante una correosa Sudáfrica, que aguantó más de una hora a los dobles campeones en Yokohama.

«El de hoy fue un partido enorme de los dos equipos y afortunadamente para nosotros, cayó de nuestro lado» se felicitó el seleccionador neozelandés Steve Hansen. «Fue otro partido titanesco entre Nueva Zelanda y Sudáfrica y la gente disfrutó de lo que vieron», añadió el técnico.

En el estadio de Yokohama, el mismo que será el escenario de la final el próximo 2 de noviembre, Sudáfrica se adelantó con un penal transformado por Handre Pollard nada más comenzar.

Pero los All Blacks ofrecieron por momentos un gran juego en la primera parte, lo que les permitió llegar a la pausa con 14 puntos de ventaja (17-3), con dos tries casi consecutivos de George Bridge (24) y Beauden Barrett (27) y el acierto con el pie de Richie Mounga (7 puntos).

Sin embargo, los Springboks no se rindieron y con un try de Pieter-Steph Du Toit nada más reanudarse el juego (48) y cinco puntos del pateador Handre Pollard (una conversión en el 49 y un drop en el 59), se colocaron a sólo cuatro puntos del rival a la hora de juego (17-13).

Gracias dos penales transformados por Mounga (67) y por Barrett (72), los All Blacks acabaron con cualquier sofoco de rebelión sudafricana y sentenciaron el partido.

«Merecieron la victoria. Dos tries por uno, 10 penales contra nosotros y dos contra ellos. Ellos fueron muy disciplinados y eso se vio en el marcador», admitió tras el partido el seleccionador sudafricano Johan Rassie Erasmus.

Irlanda en el horizonte de cuartos

La victoria, en el partido que enfrentó a los dos grandes favoritos del grupo B, prácticamente garantiza la primera plaza a los neozelandeses, que les permitiría tener un cruce de cuartos asequible, contra Escocia o la anfitriona Japón.

En cambio, la derrota condena a los sudafricanos, si la lógica de los resultados se impone, a cruzarse en cuartos de final con Irlanda, gran favorito en el grupo A.

«Nos hemos metido en esta posición nosotros solos. Vamos a tener que pelear, pero no vamos a quejarnos de nuestro rendimiento. Ellos jugaron realmente muy bien, el árbitro estuvo bien. Deberemos trabajar duro», concluyó Erasmus.

Este resultado manda un aviso a todos los grandes pretendientes a destronar a los All Blacks, que llegaban a Japón con algunas dudas tras perder el Championship por primera vez desde 2016 y que habían perdido dos veces en el último año (contra Irlanda en noviembre y Australia en agosto): los grandes dominadores del rugby mundial quieren ceñirse la corona de campeón del mundo por tercera vez consecutiva.