El presidente de México confesó hoy que sería el primero en probar la vacuna rusa contra el coronavirus, denominada Sputnik V
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confesó hoy que sería el primero en probar la vacuna rusa contra el coronavirus, llamada Sputnik V, y afirmó que, si ven que su implementación en ese país «da resultados y es eficaz», se contactará con el gobierno de Vadimir Putin para llevarla a México, porque «en este asunto no debe haber ideologías».
«Si vemos que da resultados y es eficaz, estableceremos comunicación con el Gobierno de Rusia, y si hay disponibilidad, adelante, y para que no quede duda de la importancia que tiene para nosotros, yo sería el primero en dejarme vacunar, porque me importa mucho», expresó el mandatario en su conferencia de prensa matutina.
De esta forma, López Obrador confirmó el anuncio que había realizado la semana pasada su canciller, Marcelo Ebrard, quien dijo que el Ejecutivo mexicano había solicitado a las autoridades rusas información clínica sobre la vacuna, cuya producción en serie comenzará a desarrollarse mientras se transita la fase 3 de pruebas, lo que generó cuestionamientos se sectores científicos y de algunos países.
«En el caso de Rusia, sobre la vacuna que ellos están dando a conocer y que ya van a aplicar pronto, les digo algo que aplica para otras cosas, pero fundamentalmente que tiene que ver con la salud del pueblo: en este asunto tan importante, no debe haber ideologías, hay ideas, pero la salud es primero», subrayó el mandatario, apodado AMLO.
El jefe de Estado dijo que las autoridades diplomáticas y sanitarias mexicanas continúan con la comunicación con cuatro países que trabajan en el desarrollo de una vacuna: Rusia, China, Estados Unidos y Francia.
«Si en Rusia, en China, se tiene primero la vacuna, y se demuestra de que es eficaz para salvar vidas, de inmediato establecemos comunicación», con los gobiernos de esos países, prosiguió.
López Obrador anunció que asumiría personalmente la comunicación sobre este asunto con sus pares ruso, Vladímir Putin, el chino Xi Jinping y el estadounidense Donald Trump.
«Yo hablaría personalmente con el presidente de China, con el presidente Putin, para que se tenga la vacuna y lo mismo en el caso de Estados Unidos, que tenemos buena relación con el presidente Trump», indicó.
La afirmación fue hecha al comentar los esfuerzos de México y Argentina para producir la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford, del Reino Unido, y el laboratorio Astra-Zeneca, con apoyo de una fundación de Carlos Slim, el mayor multimillonario mexicano, refirieron medios locales y la agencia de noticias Sputnik.
El mandatario agradeció a la Fundación Slim por aportar capital de riesgo para el proyecto de la vacuna, la cual dijo, podría tener sus primeros resultados a principios de noviembre próximo.
Destacó que estos resultados se pondrán a consideración de la (Comisión Federal para la Protección contra Riesgo Sanitarios (Cofepris) y se está trabajando para «que no se pierda tiempo, que se tengan las dos cosas a la vez, que nos cercioremos que sea efectiva la vacuna y que se tenga rápido».
El Gobierno mexicano dispone de un fondo especial para que cualquier vacuna se aplique «de manera universal y sea gratuita», ya que el país cuenta con recursos para ello, concluyó.