Policiales

Lo condenaron a 11 años de cárcel por la violación de una joven asesinada en 2003


La pena recayó sobre un hombre de 36 años por el abuso de Paula Toledo, de 19. El crimen de la víctima sucedió el 31 de octubre la ciudad mendocina de San Rafael

A 17 años de la violación grupal y el asesinato de la joven Paula Toledo, de 19 años, la justicia de San Rafael condenó a 11 años de cárcel al novio de la víctima, el artesano Marcos Federico Graín, en un fallo que generó polémica.

El ahora condenado, quien llegó en libertad al juicio, fue señalado en la investigación como quien «entregó» a la víctima al grupo de jóvenes que la violó en manada.

En un primer juicio por el caso, realizado en 2006, los otros imputados -Iván Gauna y los hermanos Víctor y Alejandro Echegaray- lograron ser absueltos por el beneficio de la duda.

Como pasaron más de 17 años del hecho, la acusación por el crimen en San Rafael prescribió para todos los sospechosos menos para Graín, quien se encontraba prófugo al momento del primer juicio.

El fallo de hoy generó polémica y expresiones de repudio de los familiares de Paula ya que los jueces Néstor Ariel Murcia, Alejandro Celeste y Esteban Vázquez Soaje consideraron a Graín, hoy de 32 años, culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal cometido por dos o más personas, pero no lo encontraron responsable del posterior asesinato de la chica.

El fiscal Pablo Peñasco había solicitado para el imputado 25 años de prisión bajo el cargo de «abuso sexual seguido de muerte en calidad de partícipe necesario».

La familia de Paula, representada por los abogados Guillermo Rubio y Celeste Marchetti, habían pedido la pena de prisión perpetua bajo el cargo de «homicidio criminis causa».

La defensa, por su parte, había reclamado la absolución de Graín sosteniendo que ningún testigo había podido ubicar al imputado en el lugar del hecho.

El debate comenzó el 2 de diciembre pasado y contó con más de 70 declaraciones testimoniales y hasta una inspección ocular.

El hecho juzgado sucedió el 30 de octubre de 2003 y el cuerpo de Paula apareció en una acequia de la calle Victorino de la Plaza, a 400 metros de avenida Balloffet, en el barrio El Sosneado.

La víctima estaba semidesnuda, boca abajo, rodeada de basura y bolsas de plástico.

De acuerdo con la investigación, la joven fue llevada por Graín a una casa abandonada en la que algunos jóvenes se reunían a tomar cerveza y consumir drogas.

En el lugar la chica fue golpeada, violada por varias personas y luego asesinada. Su cuerpo presentaba golpes en la cabeza, producidos por una botella de cerveza; cortes en el rostro y quemaduras.