Los 36 grados que azotaron Rosario concluyeron en una intensa tormenta y el descenso de la temperatura unos ocho puntos
Minutos antes de las 17, los truenos que se escuchaban en el cielo totalmente nublados fueron la antesala del chaparrón que cayó sobre Rosario. Con gran cantidad de agua en pocos minutos, la ciudad se refrescó luego de una jornada con altas temperaturas.
Los 36 grados que azotaron Rosario concluyeron en una tormenta que hasta llegó a producir granizos en algunas zonas.
Si bien el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) había adelantado las lluvias, según el propio informe no llegarían hasta la noche.
Sin embargo, algunas horas antes hubo que sacar paraguas y sacar la ropa del tender.
Ahora, con las precipitaciones de hoy, el pronostico marca inestabilidad y lluvias hasta la tarde del jueves, aunque las temperaturas no bajarán y se mantendrán entre los 28° de mínima y los 34° de máxima.